La película se basa en una obra de teatro, tan solo hay tres personajes y bordan su interpretación. La acción transcurre en Chile tras la caída militar, Paulina y Eduardo (Sigourney Weaver y Stuart Wilson) han sido comunistas. Ella pasaba textos de otros simpatizantes al director de un periódico de izquierdas (Eduardo), pasa el tiempo y Eduardo se convierte en uno de los más prestigiosos abogados de Chile. Pero de repente aparece un antiguo médico del régimen al que reconoce Paulina y…. no se debe contar más.
A pesar de ser tan solo tres los actores, en ningún momento se hace pesada, se marcan muy bien los tiempos. Extraordinaria dirección digno del mejor estilo de Polanski.