Sin lugar a dudas todo un clásico del terror y el suspense. Lo primero que hay que destacar es el año en el que se hizo, en el que los efectos especiales y el maquillaje no es decir que brillaran por su nivel. Narra como es quemado un museo fabuloso de cera y el artista decide vengarse con cierta dosis de locura. Lo macabro no hace alarde de sangre ni escenas escabrosas y se limita a un correcto suspense basado en la imaginación del público. Vincent Price realiza uno de sus grandes papeles y posiblemente del que siempre se le recuerda. Las figuras y la recreación fantásticas. Todo un referente todavia en nuestros dias imitado.