Gloria

Me esperaba más de la trama, en algunas secuencias quería que pasara algo y todo sucedía muy lento, pero disfruté de esa película gracias a su actriz. Aunque yo tenga 35 me pareció sentir todo lo que estaba sintiendo ella, con su silencio y sus miradas. Maravillosa actriz y buena película, un himno a la vida, siempre, a pesar de las decepciones.

Atrevida película chilena sobre la soledad madura, la positiva constancia de no desfallecer y la agotadora tarea de mantener intacto tu optimismo, tu imperturbable esencia tan dura y repetidamente golpeada; una emotiva y maravillosa Paulina García, alma mater de toda la historia, que te lleva y transporta por su largo peregrinaje de esperanza y desolación. Tan sincera como humana, tan radical como dolorosa, tan humillante como esperanzadora..., un sinfín de emociones agrupadas todas en una misma mujer que, con toda la fuerza de su corazón, de ese fecundo yo interior, se resiste, se agarra, se nutre de la más mínima ráfaga de viento para poder respirar el aire necesario para continuar y no caer. Un baile de emociones y sensaciones,magníficamente conducido por su actriz protagonista y por la sencilla y modesta dirección que sabe no destacar para que luzca el personaje -más una sorprendente y pegadiza banda sonora-. Ahora..., con todo lo dicho, de lo que me ratifico -sin lugar a dudas-, algo falla pues no logras sentir la comedia que esconde tan profundo drama, su supuesta mordaz e incisiva personalidad; sólo eres capaz de captar su dolor, su descenso, su resistencia diaria, sus firmes pasos..., pero con la excesiva duración de la cinta, el personaje llega a fatigar -aunque sea sólo levemente-, te extenúa su andar, no logras sentir lo que el trailer y el cartel llegan a insinuar, esa fundamental elevación que te pasa por delante sin llegar a sugestionarte pues, reconozco al personaje y sus sentimientos, puedo leerlos y observarlos aunque..., no me siento hipnotizada por ella, es más, estoy deseando que acabe la cinta!

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¡Aquí hay una película que dá Gloria verla!

Aunque tiende a ser un poco lenta, en realidad pasan muchas cosas en ella. Gloria es una mujer vital e interesante, fabulosamente bien interpretada por Paulina García, que pasa por un momento de soledad. Busca lo que no tiene como cualquiera lo haría, salilendo de fiesta, aunque cualquiera también sabe que no se encuentran en esos foros algo tan vital e interesante que merezca la pena.

En esta película llena de música, nos sentiremos reflejados con una historia de romances totalmente alejada de la ñoñería que nos hará recordar que la felicidad está siempre dentro de nosotros.

Estamos ante una de esas películas en las que su personaje principal es incluso más grande que la propia historia que se nos cuenta. La película de Sebastián Lelio está estructurada única y exclusivamente bajo la figura de Gloria a la que una magnífica Paulina García dota de cuerpo y alma. Ella ocupa todos y cada uno de los planos de la película incluso cuando de protagonista de la escena pasa a ser pura observadora. A Gloria la vemos divertirse, preocuparse, gozar, sufrir, enamorarse, desengañarse, reir, llorar, en definitiva la vemos vivir. Y sobre todo luchar. Porque esta no es otra cosa que la historia de una luchadora tenaz a la cual la vida la va sometiendo a duras pruebas de las que siempre consigue salir no sin cicatrices pero si más fuerte. El problema es que su fuerza acaba por eclipsar al resto de personajes y la narración va sufriendo altibajos conforme su protagonismo decrece o aumenta. Pese a todo “Gloria” se perfila como una película filmada a golpe de corazón, un viaje emocional en esa montaña rusa que a fin de cuentas es la vida diaria.

Lo mejor: Paulina García tan grande como su personaje.

Lo peor: ciertos momentos musicales.

Esta película, que pretende filmar lo cotidiano, es retórica a su manera, eso del tópico de que el amor no tiene edad. Y, a propósito, qué desagradables las escenas de sexo entre ella y un viejo barrigón y con faja. Eso se podría haber elidido.
Lo más destacable es la interpretación de Paulina García presente en todas las escenas de la película, con un registro espléndido.
Lelio usa mucho las escenas cortas, apuntes apenas, pero que suelen dar alguna indicación para construir el personaje. Es menos hábil en escenas más extensas.
El guión está engrosado para alargar el metraje. Por ejemplo, no tiene mucho sentido la aventura con un desconocido,que acaba en la playa.
La película se deja ver! interesa! pero no es ninguna gran película.