Zapatos Rojos y los siete enanos

Desmitificadora película sudcoreana, en la línea de Schrek, pero con un aire muy diferente. Toma diversos elementos, más que de los cuentos, de las películas de princesas, y los vuelve del revés con bastante gracia.

En el momento de verla, el diseño de personajes me recordó mucho a Enredados (pobre de mí, ni idea de quien es Jin Kim) pero ahora ya sé, gracias a otros comentarios, que el equipo de creadores es prácticamente el mismo. Con todo ello, tiene las suficientes novedades como para ser interesante por sí misma: la Blancanieves "descalza", los siete trolls, y sobre todo, ese peculiar equipo de robotillos de madera, que encontré encantadores.

Los créditos finales, con el destino de los siete trolls, son muy divertidos.

En resumen, una más que recomendable película de animación para todos los públicos. Si la vais a ver, no os arrepentiréis.

La premisa de la que parte ésta especie de parodia del eterno cuento de los Hermanos Grimm “Blanca Nieves y los Siete Enanitos”, sigue siendo interesante: ¿Qué es más importante: el aspecto físico o la forma de ser? La respuesta que, con cierta broma, he dado en algunas ocasiones, es muy concreta: Depende de para qué quieres a la chica… o al chico. Sin embargo, la respuesta seria y responsable -sobre todo cuando de formar pareja se trata-, debe ser más profunda: Es más importante el ser interior porque éste suele tener un mayor sello de permanencia y tiene efecto en la plenitud de las relaciones; en cambio, la belleza física es efímera, ya que comienza a desgastarse en unos cuantos años. Empero, siendo para mí el momento de elegir, prefiero en principio a una chica que sea bella, sensata, intelectualmente formada, tierna y emprendedora, por la sencilla razón de que ésto es lo que hace plena a una mujer y, en mayor o menor grado, todo ésto lo logran muchas cuando le prestan suficiente atención… y claro, entiendo que para aspirar a una mujer así, hay que procurar ser un hombre muy equilibrado.

En el caso de la princesa llamada, Zapatos Rojos, en ésta película: Cuando se pone esos zapatos, luce grácil y preciosa, y cuando no le sirven… ¡pues, tiene la opción de asumir un plan de adelgazamiento!... y si cuando está delgada sigue siendo la misma chica encantadora, leal a su padre y noble como ninguna, ¡cómo no voy a preferirla delgada si, a fin de cuentas, es la misma mujer!

Pero aquí, ¿no resulta curioso que ella gane con Merlín si se vence el hechizo, y el pobre mago pierda si ella deja de poseer los zapatos rojos?

Al margen de estas disquisiciones que no pretenden sentar cátedra, pues, para gustos las variedades, la película del surcoreano, Hong Sung-ho, <<ZAPATOS ROJOS Y LOS SIETE TROLLS>> resulta bastante entretenida y es todo un rompecabezas para los amantes del cine de animación e incluso para los lectores de cuentos infantiles, pues, contiene una serie de referencias que resulta interesante descubrir. Por ejemplo: ¿De qué cuentos provienen cada uno de los Siete Intrépidos (Fearless Seven): Merlín, Arthur, Jack, Hans y los trillizos Pino, Noki y Kio? ¿A qué otro personaje animado nos recuerda la, Blanca Nieves, que aquí vemos?, ¿El gigante de madera que conducen los trillizos, rememora a cuál personaje? ¿Hay alguien por ahí que se asemeje a Totoro?... Recuerden que, el lugar donde transcurren los hechos se llama, La Isla de los Cuentos de Hadas.

La película goza de un calificado trabajo de animación en CGI; la banda sonora es muy atractiva… y, entre otras cosas, el cuento de Blanca Nieves ofrece interesantes giros e incluso parodias que la hacen novedosa e impredecible. Zapatos Rojos resulta adorable y el más simpático, para mi gusto, es, sin duda, el incompetente príncipe Cualquiera (Average).

Título para Latinoamérica: <<ZAPATOS ROJOS Y LOS SIETE ENANOS>>