On the Other Hand, Death

De vez en cuando uno se encuentra, en películas que no han tenido ninguna repercusión, con una presentación con los títulos de crédito muy artísticos, muy trabajados, en los que hasta la música está muy bien puesta para indicarte que tipo de película vas a ver. Este es el caso. La película trata sobre el rechazo y acoso que sufren dos lesbianas que viven juntas en un pueblo, una de ellas maestra. Pero el análisis de esa homofobia se hace a través de una investigación por parte de un detective que también es homosexual y tiene su pareja. Las andanzas del detective, sus investigaciones y los métodos que utiliza son bien expuestos por un guión perfecto. La realización de ese guión es lo que realmente da valor a la película ya que el director tiene un montón de detalles en la planificación y en la puesta en escena que denotan que sabe lo que hace. Concrétamente, me ha gustado la secuencia en la que el padre de un muchacho va a buscarle a casa de la maestra mientras está nevando. Son todos buenos actores, al menos son actores, y son capaces de hacer creíble la tensión, la angustia, el enfado, el amor. Un pero…, no me gusta que se recurra a una explicación final de todo lo ocurrido. Hay que darle más datos al espectador para que sea él quien haga las deducciones.

Aparecen aquí la segunda y tercera secuela . La primera se titula THIRD MAN OUT. Es también sobre Donal Straiche. Quisiera saber si habrá alguna mas después de estas 3. Todas ellas valen a pena y tocan un género poco salido como estas en tema homosexualidad. Realmente tatno los personajes como la fusión de intriga y algo de comicidad funciona.

Pues no se puede decir mucho más, si te gustan las anteriores esta te va a gustar, si no, no la veas porque no te va a gustar. A mí la verdad es que me decepcionó un poco ya que es básicamente lo mismo, no se calentaron la cabeza demasiado para darle un toque diferente. Lo digo habiendo visto las dos anteriores, «Third man out» (2005) (TV) —la primera— no está en FilmAffinity.

Seguimos con el papel interpretado por Chad Allen llamado Donald Strachey, el típico antihéroe que aparece en el cine negro. En esta ocasión la atmósfera está menos obviamente influenciada por el cine negro, que lo está, pero no tanto como en la anterior de la saga «Shock to the system» (2006).

Ahora bien, la representación que se hace de una pareja homosexual masculina es bastante acertada, es como cualquier otra. Como ya dije en la crítica de la del 2006 me parece que todas las películas que traten la homosexualidad —de ambos sexos— deberían ser así; la película va de un detective que en su vida privada mantiene una relación con un hombre, pero esto no afecta a su trabajo, punto pelota.