Teen Beach Movie (TV) (TV)

Normalmente Disney es capaz de lo mejor y lo peor. Puede hacer desde El Rey León hasta High School Musical.
Con Teen Beach Movie han acertado, la película está bien, es sencilla, pero agradable.
Tiene buenas actuaciones, buenas coreografías, canciones y situaciones divertidas y está muy bien para pasar el rato. Simplemente hay que desconectar un poco las neuronas y divertirse.
Con la de truños que ha hecho Disney Channel para televisión tenía muy malas espectativas para esta película, pero la vi y me entretuvo, si hasta me divertí viéndola.

No es una Obra Inmortal de Disney, pero cumple con su función de entretener.

Canal Disney intenta sacar un nuevo éxito después del golazo que metieron con “High School Musical”, pero esta vez no se encuentran tan inspirados.
Debo decir que no conocía de nada esta película, pero el pasar una tarde con tu sobrina que está en esa edad de los primeros enamoramientos, hace que insista en que su tío se quede con ella para ver este film.
“Teen Beach Movie” es un musical que resulta más una mezcla barata de “West Side Story” y “Plesantville” que otra cosa. Uno puede ver muchísimos parecidos entre las películas haciendo que la historia no resulte para nada novedosa.
Tengo que decir (por mucha vergüenza que me de), que el principio me gustó. Yo empecé viendo la película pensando que iba a ser una porquería, y cuando llevaba unos 15 minutos me estaba quedando helado porque reconozco que la historia me parecía entretenida, las canciones eran pegadizas y las coreografías eran interesantes. Pero a partir de ese cuarto de hora, todo toma otra dirección y deja de ser una película entretenida y pasa a ser un auténtico pestiño.
Lógicamente la película está destinada al público usuario de Disney Channel, y sobre todo en la edad propicia de enamoramientos. Aunque hay ciertos puntos que los veo demasiado infantiles que ni siquiera entusiasmaran a este tipo de público (me refiero a los personajes de los villanos).
No obstante, hay que decir que la película resulta bastante pesada en prácticamente toda su totalidad, haciendo que esa estrella que tuvieron con “High School Musical” desaparezca en apenas unos minutos de empezar.
En fin, historia bastante decepcionante que se basa en dos magníficas películas, y realiza un cocktail prácticamente sin interés, salvo por algunas canciones y coreografías (que hay que reconocer que los chicos las defienden bien).

Es una película auspiciada por la factoría Disney, ¿qué quieren?
Prima hermana de exitazos de los últimos años como High School Musical o Camp Rock, Teen Beach Movie tiene claro que su demográfico principal son los niños y pre-adolescentes y por ello apuesta por los ambientes chulos (¿qué hay más chulo que la playa?), los romances pubescentes y las canciones. Sin embargo, se mueve con un sentido del humor acertadísimo entre la parodia del cine adolescente y los musicales (la canción que cantan Brady y Mack en la que se quejan de que precisamente han empezado a cantar para todo, las tontas personalidades de los miembros de las tribus) y el homenaje a los mismos y al típico cine de playa (ver la llegada de Brady y Mack a la película o el número musical "Like me", un momento puro Grease). Todo ello mezclado con el siempre presente mensaje sobre el conflicto entre madurar y seguir siendo jóvenes despreocupados, entre seguir los sueños o adaptarse a las normas y por supuesto una oda nada disimulada al amor y la amistad, da como resultado un producto más que digno, con canciones estupendas (para su estilo) y divertidas, que no insulta la inteligencia de nadie y que hará las delicias de los que quieran seguir sintiéndose chavales por un rato.
No es una joya imperecedera del cine ni una obra maestra pero se deja ver muy bien y es muy simpática y entretenida.

Lo mejor: Su innegable simpatía y su mezcla de parodia y homenaje al musical y a las películas de playa.
Lo peor: La subtrama de los científicos malvados, absolutamente innecesaria.

Hará ya unos siete años del estreno televisivo en el canal Disney de la película High School Musical (2006) dirigida por Kenny Ortega y protagonizada por unos jóvenes Zac Efron, Vanessa Hudgens y Ashley Tisdale. Era como una versión juvenil del siglo veinte de la película Grease. Pues bien, ahora le ha tocado el turno de West Side Story.

La cinta, aunque tiene momentos, situaciones de taparse la cara de vergüenza ajena, me ha parecido pasable, aunque no le llega a la altura de la mencionada High School Musical.
Veo homenajes a West Side Story, el romance a lo Romeo y Julieta, pero esta vez en vez de estar en una gran ciudad, estamos en una playa. Y encima con unos villanos de pacotilla de los que hacen reir. Y metería en el saco a la notable Pleasantville (1998), aquel film dirigido por Gary Ross con Tobey Maguire, Jeff Daniels y Reese Witherspoon. Dos hermanos que no se llevaban muy bien. Un buen día, y gracias a un mando a distancia, van a parar a la serie a la que uno de ellos es fan.
El caso es que mezclamos estas dos cintas y nos sale esta Wet Side Story, en el que cambiamos el mando a distancia por una tabla de surf mágica. Las canciones son correctas, al igual que sus números musicales. Los actores están bien, dentro de lo que cabe, al menos con el guión que tienen entre manos.
Para pasar un buen rato. No hay nada más que decir. Bueno sí, tras los créditos final, hay una última secuencia. ¿Es importante? No me lo parece, pero yo aviso por si hay hay alguien que se quiera quedar hasta el final.

Teen beach movie es la mezcla insípida y entretenida de Wet Side Story y Pleasantville teniendo como pareja central Brady y Mckenzie que van a tener una aventura en una playa cuando a Mckenzie se siente presionada por una invitación que sabe más a una obligación de su tía Antonia para hacer una preparatoria en la ciudad que residirá. En menos de dos días, Mckenzie intenta surfear en una impredecible ola que la llevará a una aventura fílmica pero fracasa y Brady la rescata. Ahí llegan a una playa que ha sido disputada por los surfistas y los harleystas -moteros-, en el intento del control de dicha isla.
Se hizo un trueque de parejas: Brady con la harleysta Lela y Mckenzie con el surfista Tanner. Menos mal no hubo química de ninguna pareja por lo que quedó como tal y posteriormente, Lela y Tanner pese a ser de polos opuestos, lograron tener la química.
Sin embargo, hubo un antagonismo torpe e innecesario de un ricachón pedante y un científico atolondrado con lo cual intentaron comprar la isla pero no se llevó a cabo con lo cual secuestraron a la pareja central y para cesar la disputa de dicha isla entre surfistas y harleystas se unieron para rescatarlos. Si iban a aplicar el viejo adagio de: "entre peleas de dos, un tercero saca tajada", debieron pensarlo dos veces ya que fue demasiado predecible, inverosimil y bajó puntos a la historia.
En cuanto a la coreografía y al canto, fue angelical, diáfano; el espacio de acuerdo a esas películas de antaño que vieron e imitaron los protagonistas fueron adecuadas para el estilo. El sello que puso Ross Lynch tanto para el baile como la música, tengo que admitirlo, fue impresionante, pese a que la actuación fue inferior y aún sigue enganchado en el Austin Moon (Austin y Ally) recochero, osado, seguro de sí mismo, templado; en fin, y la música que es su fuerte mejoró demasiado, empero, en su voz debe trabajarlo aún más. Por lo tanto, fue justo merecedor de premios habidos y por haber en su trayectoria artística ya que tiene el potencial para todo y para sus futuros no muy lejanos. ¡¡¡¡Al César, lo que es del César!!!!
Otra acotación de la película es el resto del elenco que estuvo acorde con la película, no necesita presentación; sin embargo, el nudo de la historia estuvo tremendamente pobre y el conflicto se quedó ahí. Por lo tanto, la película fue sencilla, entretenida, decente pero no hubo innovación en la película, se limitó al entretenimiento, la trampa fácil y al rebusque de historias recicladas -valgando la redundancia-, y la audiencia conformista.
Esperaré la segunda secuela de está película que ojalá la mejoren en cuanto al nudo de la película y si va a aparecer un tercer grupo en la cual haya un robustecimiento del conflicto mencionado y que disminuyen un poco el baile para que la trama sea más impredecible, verosimil y original, y no una melascolanza de películas de antaño que fueron un hit como el calcado, soporífero y prescindible High School Musical.