La madrastra

Un melodrama que mezcla elementos propios del género sacados de los folletines aztecas más clásicos con otros elementos ya específicamente españoles. La trama se desarrolla en torno al objeto del deseo de dos seres muy diferentes y la duración está muy bien ajustada a lo que se cuenta puesto que ninguna escena se alarga innecesariamente sino que se va al grano en cada momento de la narración, consiguiendo Roberto Gavaldón lo que no consiguió en la otra película en la que dirigió a Amparo Rivelles que fue "La playa vacía" o sea una fuerza narrativa envolvente. El argumento eso sí es morboso, y a ello se presta la excelente y bien matizada interpretación de John Moulder-Brown como adolescente descarado y consciente de su atractivo. Este actor británico tuvo otras tres experiencias fílmicas en el cine español generalmente en papeles fuertes. La ya mentada Amparo Rivelles ofreció también una interpretación memorable. No obstante deben de ser vistas también las interpretaciones más ingenuas de la primera etapa de su carrera que son igualmente interesantes. En tierras aztecas triunfó también con telenovelas como "Lo imperdonable". Y Ramiro Oliveros realmente magnífico también en el papel más desairado de la obra. A quien le gusten los melodramas pasionales encontrará en "La madrastra" lo que espera. Y no hay que olvidar a los excelentes intérpretes secundarios que acompañan a los tres protagonistas.

Roberto Gavaldón es uno de mis cineastas favoritos por excelencia, además mi compatriota y creo que con esta película ha hecho una incursión al cine español bastante decente. Si bien la trama está llena de clichés y estereotipos ya que trata la clásica fórmula del romance "40 y 20" creo que Gavaldón sabe muy bien imprimir el drama y construir estas historias de amor loco, tortuoso y tóxico.

Quiero destacar que Amparo Rivelles está maravillosa...en toda su esplendor actoral y con una belleza otoñal que derrocha sensualidad.

Aunque no es la mejor película de "El ogro" Gavaldón me encantó que se atreviera a abordar el tema de la homosexualidad (aunque sea sutilmente) y sólo un buen director sabe plasmar en la gran pantalla de manera digna y nada incómoda: el deseo erótico, la seducción y la sexualidad de dos hombres.

Amparo Rivelles,en La Madrastra de 1974,nos demuestra sus dotes de seducción.Ella seduce a un millonario empresario,enfermo del corazón,que está enamoradísimo de ella,Ismael Merlo.Ella se casa con él,quien, viudo quería casarse con ella, Él fallece,delicado del corazón,de un infarto,por no seguir los consejos de su cardiólogo que le había indicado no cansar tanto el corazón,no hacer tanto el amor.
Amparo Rivelles,interpretando una viuda millonaria,seduce a su hijastro.
Muy interesante película donde la actriz da lo mejor de sí misma.