Secretos de guerra

Me gustó el inicio de miradas y gestos; hizo que recordara la narrativa visual del director argentino Marco Berger. Muy bien interpretada, caracterizaciones precisas, ajustadas a las necesidades de una historia, donde la clandestinidad forma parte del propio placer de lo prohibido.

Su desarrollo es minucioso, pero en ningún momento perjudica el ritmo de la trama. Los personajes están bien trazados, manteniendo peculiaridades y subrayados.

La realización es clásica, con una banda sonora que incide sin estridencias, acompañando en una ajustada composición. Entretenida para el público a quien va destinada.

No es una película brillante, pero posee cierta sensibilidad... Sus inicios me recordaron al cine de Marco Berger, alojado en miradas y elocuentes gestos.

Basada en una historia real, la película juega con elementos tradicionales... tal vez en cierta manera manidos, aunque he de admitir que gestionados con pericia y bien resueltos.

Existe en ella una lectura de desesperanza, enseñanzas sobre el desprecio gratuito, el daño innecesario... la ausencia de felicidad, o esos instantes de satisfacción esquiva.

Ya la estructura de Secreto en la montaña se ha convertido en una especie de subgénero dentro de las películas gays. Esto es: historia que transcurre en el pasado, dos hombres a los "que no se les nota", y como la sociedad represiva en la que viven les impide desarrollar su relación, por lo que terminan tomando decisiones arbitrarias, injustas e involuntariamente crueles con quienes los rodeaban, pero no le interesa profundizar en eso, sino para meter clichés. Lo mismo las contradicciones de Sergey y Roman.
Lo peor: es predecible, cursi, se torna lenta, usa todos los recursos del melodrama más culebronesco. En ningún momento trata de profundizar en cómo era la vida en la URSS de los 70s y 80s, ya que su afán es el universalismo de la historia, lo que en este caso por la forma que está contada, la hacen ver superficial.
Lo mejor: es honesta, en ningún momento niega ser un culebrón comercial, no sé las de lo que no es.
Buena factura técnica, interpretaciones correctas, los protagonistas tienen química.