Aurora boreal

Así es como me quede después de verla, helado. Aurora boreal es la adapación de la novela de Asa Larsson, novela que no he tenido la oportunidad de leer. Aunque la pelicula data del año 2007 no ha sido estrenada en España hasta el 2010, evidentemente auspiciada bajo el éxito en el campo literario y cinematográfico de la trilogía Millenium. El punto de partida parecía muy prometedor, más en mi caso ya que me confieso amante de las thrillers de escenario nevado como Fargo o Un plan sencillo.

Esta esperanza dura muy poco, lo poco que tardas en darte cuenta que todo son decisiones horribles en pos de hacer la peor película posible con el material que tenían. La trama en sí promete un rato de entretenimiento que no perdurará pero que será eficaz, sin embargo todo hace aguas desde que comienza. La dirreción tiene una mezcla de videoclip chusco intercalada con "sutiles" planos que te indican que algo no cuadra.

El gran problema es que ni siquiera uno tiene interes en saber que pasa y la sorpresa final le deja a uno como estaba, mirando el techo a ver si por casualidad aparecen las caras de Belmez. A todo esto no ayuda una protagonista con una indiferencia insultante a todo "¿Qué el pueblo parece una secta religiosa? qué más dá, mi casa es una fortaleza inexpugnable" (es la frase que esperaba que dijese en cualquier momento).

En definitiva, no pierdan el tiempo. La estética nevada hace un gran favor a los thrillers, pero sin contenido dan como resultado una bonita postal por fuera, pero un engendro por dentro.

El éxito literario de Stieg Larsson con la discreta saga Millennium reactivó el interés cinematográfico por las intrigas policiacas más o menos noir, con una diferencia significativa: ahora el foco de atención ya no recaía en EE.UU. o Francia (principales cultivadores del género), sino en la Europa nórdica y pulcra, lo que permitía desarrollar interesantes lecturas críticas sobre la doble moral que exhibe toda sociedad aparentemente perfecta, obligada a esconder sus miserias para preservar intacta una superficie que esconde puro veneno, y poder percibir al viejo continente como una construcción colectiva consumida, en sus entrañas, por viejos demonios que no terminan nunca de desaparecer: el nazismo, la homofobia, la violencia de género, el fundamentalismo religioso...

Aurora boreal llega a nosotros tras el boom de Lisbeth Salander, pese a ser cronológicamente anterior, y compartiendo con ella varios puntos de contacto: más allá de la conexión sentimental (la obra nace de la pluma de la viuda de Larsson), la película también se centra en la investigación de una pequeña comunidad regida por secretos que la protagonista (Scorupco) deberá ir descubriendo paulatinamente, secretos que terminan revelando la fragilidad de una sociedad sueca incapaz de gestionar con un mínimo de ética las perversiones humanas que se desarrollan en su propio seno.

Pero hay algo que falla: la batuta del director. Se agradece ver recuperada a la bella Izabella Scorupco (a la que no disfrutaba desde la infame El exorcista: el comienzo) y hay que reconocer que el escenario que sirve de marco a la película (ese nevado, hermético y religioso pueblecito sueco) tiene su miga, pero la roma realización y su evidente trazo televisivo merman muchísimo la eficacia de una película que se siente plana y vulgar, sin capacidad para generar inquietud en el espectador o alcanzar picos de tensión que apenas asoman un poco el hocico en el desenlace, cumplidor y nada más.

En lugar de apostar por la creatividad y la inteligencia, Lindblom decide deconstruir tramposamente un instante clave (el asesinato del líder religioso) a través de flashbacks feúchos que arrojan luz progresivamente al misterio que nutre la película, dejando que la protagonista encaje las piezas de forma un poco fortuita y caprichosa, como la propia narrativa de la película, que hace avanzar la acción sin demasiada fluidez. Tampoco ayuda el desdibujado perfil de algunos personajes secundarios (los padres) ni la falta de carisma del conjunto.

Se como sea, es una película que se deja ver y que agradará a los aficionados al policiaco europeo (tipo Millennium o Wallander) y a quien quiera husmear en la mezquindad de una nación cuya reputación universal siempre ha sido intachable. Como suele ser norma, el cine negro vuelve ser esa perfecta herramienta con la que poder diseccionar la realidad que nos rodea.

Lo mejor: el tercio final, ganando en intensidad.
Lo peor: su escasa ambición estética.

Después de terminarme el libro y hacer un pequeño descanso me he puesto a ver la versión cinematográfica de "Aurora Boreal" y como suele pasar en estos casos (leer el libro y a continuación ver la peli) me deja un sabor de boca bastante agridulce. Por supuesto iba preparado a esperarme un thriller intenso y a veces tenso como en las situaciones del libro pero se han dedicado a recortar partes muy importantes en la trama que aquí no dejan bastante claro y se han comido 3 o 4 personajes que no hacían daño a nadie en la novela original. Como suele pasar en todas las adaptaciones cambian y retocan partes del guión para que todo parezca más peliculero, pero cuando te lees el libro te das cuenta de lo importante que era ese desarrollo para la trama y no el de la peli.

Los personajes están bien escogidos, los decorados siempre en la nieve como marca la novela estan muy bien hechos y sobre todo Rebecka es un personaje con una personalidad que puede dar mucho juego para próximas entregas de esta literatura escrita por Asa Larsson. El desarrollo se parece al del original, pero las escenas de "flasback" o el cambio tan grande en algunos aspectos de la novela a la cinta son para pensarse en si es tán difícil llevar a la pantalla un argumento que sea realmente fiel a la novela que se basa y no inventarse otros casos para hacer más corta la peli y menos real por así decirlo. Siempre vamos a tener las comparaciones con la otra obra maestra de la literatura Nórdica, "Millennium", que a su vez están un poco mejor realizadas y tiene el tirón de la historia mucho más compleja y con unos personajes inolvidables.

**Lo mejor:
- Rebecka Martinsson, personaje carismático y con personalidad.
- Cuando lees la novela algunas localizaciones y escenas si son como tu habías pensado.

**Lo peor:
- Como suele pasar en estos casos, la lectura te enseña como es una trama bien realizada y te mantiene pegado al libro hasta el final. Cuando vés el resultado en la pantalla te quedas con ganas de más fidelidad.
- Hay partes que no explican el porqué de algunos sucesos finales.

Conclusión: Un thriller modesto, que sin leer la novela original te va a resultar entretenido pero muy convencional, y si las leido te va a parecer bastante defectuoso en algunos aspectos pero con su trama sosegada que te engancha hasta el final.

No es nada del otro mundo, pero entretiene lo suficiente como para no dejarla de ver. Parece que está de moda hacer thriller e intriga en los países nórdicos, aunque los resultados son irregulares, es curioso contemplar este tipo de cine no hecho por americanos. Es mucho más frío, lento y reposado. En Aurora Boreal nos presentan un caso turbio, feo, el de un predicador moderno y joven, con secretos inconfesables, tan inconfesables como los modos y costumbres del lugar. Con trasfondo de fanatismo religioso y una sociedad cerrada y rebosante de machismo, nos va llevando fría y lentamente a la resolución, torpe, de un caso duro y desagradable. Dirección sosa, interpretaciones corrientes, muy floja la protagonista, bonita fotografía de unos parajes helados, bellos y a veces deprimentes. Homenaje a Fargo, con una policía que no parece tal, embarazada como la genial Frances McDormand, aunque sin llegarle ni a la suela del zapato. Lo dicho, se puede ver pero a estos suecos les vendría bien tomar el sol de vez en cuando, y comerse unas papas bravas o incluso algo más picante, porque da la sensación de que funcionan en modo de hibernación...será el clima.

Me he fijado que el género al que pertenece esta cinta según Filmaffinity es "Intriga" y "Suspense", no podían estar más equivocados, después de verla uno solo pondría en género la palabra "Invisible" para aplicarla en todos los sentidos. Lo único que hace que no dejes de verla es disfrutar de Izabella Scorupco, una actriz muy correcta pero que no salva al film en ningún momento.
El comienzo no es malo, pero según pasa el film uno no se cree nada. Las actuaciones son correctas, pero nada más. La dirección es mediocre. El guión supongo que estaría bien (la novela que no he leído vamos) pero ha sido mutilado de una manera alucinante, no te enteras de mitad de las cosas, la protagonista va dando palos de ciego y tumbos de un lado para otro sin saber por que y lo que es peor, sin que nos interese lo más mínimo. Podríamos definir esta película como el anti-suspense.
Lenta, fría, confusa y aburrida, una película que sobra. Cualquier telefilm de cuatro de la tarde seguramente entretendrá más.