El señor James Wan y compañía lo bordan en esta espectacular secuela de la ya espectacular saga. Tras la muerte de Paul Walker todos pensamos que la saga había llegado a su fin, pero cuando Cody Walker apareció la cosa cambió. Como resultado de todo eso se podría decir que "han creado un monstruo", en el buen sentido, claro, las escenas son a cada cual más espectacular y es un film muy dinámico, incluso las dos horas pasadas se te hacen cortas. Un final inmejorable nos hace recordar al gran Paul y para acabar, lo que faltaba, un Jason Statham que lo borda de malo y convierte una saga ya buena (en mi opinión) en una totalmente distinta y mejor. Genial.

"Gran reparto y dirección. Gran argumento y aún mejor puesta en escena. Es una película que, sin duda merece estar en lo más alto del ránking mundial.
Es una película que da gusto ver aunque haya gente que no la sabe apreciar.
Le pongo un 10 porque sin duda alguna se lo merece."