La conversación telefónica inicial, donde el tipo hace silencios y tonos como diciendo ¿puede ser que este tipo sea tan tarado?.
Cuando conoce a la muchacha y averguenza su torpe timidez (del modo que él baja la cabeza cuando ella voltea para mirarlo)
En el supermercado buscando el producto conveniente para su astuto plan ("talk to me, talk to me").
La venta de los "divertipadores" constantemente interrumpida por llamadas de sus hermanas para comentarle peores estupideces que las suyas, y respondiéndoles: "ok. ok. Gracias" ¡¿gracias?!
La fiesta de cumpleaños a la cual no se anima a entrar, ingresando y saliendo por la puerta varias veces, y el alivio que denota al informarle su hermana que su amiga no pudo asistir.
El pedido de ayuda a su cuñado ("ehh..I`m a dentist") y posterior confesión acerca de repentinos ataques de llanto sin razón aparente, seguida inmediatamente por uno de estos!!
"...no sé exactamente que hay de malo en mi porque no se como son las demás personas"
La llamada a la línea hot y su desconcertante sistema. La conversación posterior : "tienes novia? Sí (miente sin vacilar). Y donde está? Ellaaaa....salió."
Las conversaciones telefónicas en Hawaii (Le dice a la hermana que la llama desde el trabajo con ruido de muchedumbre en desfile de fondo!!)
La escena en la habitación del hotel (como me gusta tu cara, te la masticaría, te la molería a martillazos!)
La escena del bar (Señor, le sangra la mano. Señor, llamaré a la policia. Señor, voy a partirle la cara, retírese). Y esa música que avanza con ellos mientras gentilmente se retiran.
Cuando vuelve para besarla y no recuerda el departamento y nuevamente un preciso, atinado y agradable (sí, ¡agradable!) acompañamiento musical.
Y los gestos. Y el traje. Y las respuestas "I don`t know" una y otra vez. ¿Y el armonio?.
Sí. Nada tiene sentido, sólo en mi condenada, maldita oligofrenia, que me permite divertirme con tales giladas. Más de lo mismo.