En estos tiempos, en los que se hace un guión con tres lineas y un protagonista de renombre, da gusto ver a un director que hace sus películas minuciosamente.
Buenos actores, una historia sólida y un apartado técnico perfecto hacen que mientras avanza, nos demos cuenta de que no es una película cualquiera, va sobre ruedas.
Extraordinarios los efectos especiales, que se ajustan a lo que la historia requiere, no sobra ni uno.
La historia en sí no es compleja, pero sí lo son los conceptos que se barajan, sobre todo el de la equivalencia del tiempo entre niveles. El director, consciente de ello, lleva de la mano al espectador, para que no se pierda, algo de agradecer.
TOTALMENTE recomendable, sale uno del cine plenamente satisfecho de lo que ha visto, esa sensación hacía mucho tiempo que no la tenía.

Mentes criminales es una serie procedimental de éxito. Con todo lo que significa: cada episodio tiene una estructura común a todos ellos y un final autoconcluyente ; hay una leve subtrama que transcurre a traves de varios capítulos; los personajes son estereotipados: el agente legendario, el agente perfecto, la buenorra madura, la buenorra joven, el friki superdotado rarito, la friki hacker, el ex-marine; y se ciñe a un solo procedimiento para solucionar los casos, que sería en esta serie el perfil psicológico.
Está hecha con corrección técnica sin alardes pero con un presupuesto alto.
Como curiosidad, muchos de sus criminales están basados en criminales verdaderos.
Para mi gusto, una serie sencilla, que no ha sufrido gran desgaste y que es ligera de ver.

Coges a un negro rapero tó chulo, al chino de las hostias, a dos cómicos famosetes y dos buenorras y haces una película pensando que nada puede salir mal. Y resulta: Que el rapero,por mucho que te guste el rap te la suda porque no canta, el chino, de tantas hostias que ves, te harta, los dos cómicos no tienen ni puñetera gracia y las dos tías, bueno, están buenas, eso sí. Y todo porque el guión y el director son una verdadera m mayúscula. Me parece una verdadera pena que se gaste dinero en esto.

Hace ya tiempo que el cine de terror camina por veredas hechas por anteriores realizadores, no digo que no se pueda hacer algo nuevo, pero está casi todo visto. American horror story mezcla ingredientes ya conocidos del género de casas encantadas y los mezcla con el slasher para hacer una historia que a veces confunde,sobre todo porque no está muy claro al principio qué es cada quién, pero que va aclarándose a medida que transcurre la historia. Los personajes, una familia de clase media- alta con problemas de infidelidad, que se mudan a una típica mansión de los años 20 y van descubriendo su macabro bagaje, mientras una serie de personajes vinculados con la casa intentan manipularlos para satisfacer sus intereses. Tecnicamente es una serie bién hecha, con personajes correctos, aunque para mí, en esta primera temporada no resalta ninguno en particular, y aunque no da miedo, algún susto sí cae. Recomendable, es una serie que se disfruta.

Habiendo leido antes el libro, esperaba una versión edulcorada para el gran público; un poco de acción de la guapa, de esa que dices: ¡ Hostias, lo que le ha hecho!, o algún añadido que diera algún giro a la historia, pero me he encontrado con una película fiel al libro. Como éste, no da tregua al espectador, mostrando un mundo desolador desde el primer plano hasta el último, y haciendo, al contrario que películas homólogas, como mad max, en las cuales uno disfrutaba sin problemas del mismo mundo apocalíptico, que suframos cada minuto de su pérdida de la civilización y la naturaleza. El argumento en sí no es importante, ya que está concebida como una ventana que nos permite ver un trozo de la vida de estas dos personas, un padre que desconfía del resto de la humanidad y se limita a amar y proteger a su hijo, y un chico que todavía tiene una necesidad del contacto con otras personas.
Muy lograda la relación afectiva entre el padre y el hijo, y Vigo Mortensen creo que se está haciendo uno de los grandes grandes.