Me sorprendió esta película, de origen francés, esperaba una comedia liviana pero no, es más, el tono dramático de algunas escenas deja sin sustento a la comedia para convertirse en algo chocante, casi dramático. Las actuaciones son muy buenas, a mi particularmente me encantó Blanche Gradin. El guión encuentra la manera de mostrarnos en forma cruda y muy didáctica la realidad. La directora muestra muchísima creatividad para mostrarnos detalles de lo cotidiano y ese mundo paralelo que nos sorprende por lo ridículas de algunas costumbres que desde tiempos inmemoriales damos por hechas. Buena película y por sobre todo muy pero muy útil.