Esta última entraga me ha gustado, junto a la primera (Acorralado) presenta un personaje con sentimientos. Bien es cierto que quizá esta faceta del personaje solo se aprecie en un par de secuencias, sobre todo en cuanto a la chica. Se ve como el personaje acepta lo que es, queriendo cambiar.

En cuanto a las muchas escenas de violencia bélica, son notables, divertidas, muy dinámicas y con cierto sentido. No es como las dos anteriores entregas en la que más que una película parece un video juego con un protagonista inmortal.

Personalmente el final me ha gustado, le da cierta nostalgia al personaje. Al igual que "Rocky" se ha querido dar punto final a una saga intentando dejar un buen sabor de boca.

En principio puede atraer la idea de un secuestro con Redford y Dafoe por medio. Sencillamente, la película entretiene, llega un momento en el que te pica la curiosidad de conocer el final.
La parte más negativa es dicho final, personalmente es un final que no está a la altura, decepciona y te deja cara de bobo.

No es una película con la que te puedes divertir, solamente pasar un rato; su final no es "balsámico".

Película que entretiene; los personajes tienen peso, te metes en la película; pero el final es demasiado absurdo.

Es algo a lo que acudir cuando no tienes nada mejor que echarte a la vista.

La nota general de esta película me echó atrás, parecía de aquellas flojas que algunas estrellas punteras protagonizan para sacar algo de dinero fácilmente. Al principio parece algo insípida, pero enseguida toma ritmo.

La actuación de Nicole, es como siempre en su línea, bien es cierto que la casualidad hace que las películas que últimamente veo de ella son de un prototipo de personaje muy parecido: “madre con problemas intenta salvar a sus hijos”, pero no por ello me aburre sino todo lo contrario.

Es curioso ver al nuevo “James Bond” haciendo de médico e intentándose ligar a la “prota”, se le ve como desubicado en este otro personaje.

La parte media y final de la película son las más interesantes, me mantuvieron en tensión al estilo 28 días después.

Creo que es una película buena, que entretiene, y que te hace olvidar los problemas cotidianos. Desde mi punto de vista no puedo pedir más a una película no de culto pero sí para pasar un buen rato.

Hace poco tuve la mala idea de ver esta película. Dada su reputación entre el gremio de “entendidos” de este arte que es para mí el cine.

Debo comentar que para mí una buena película es aquella que entretiene, te hace disfrutar de una u otra forma. No busco en el séptimo arte una fuente de información, para ello están infinidad de fuentes mejores, no busco entender un suceso de cualquier índole puesto que el medio es excesivamente subjetivo. Busco inmersión en un entorno, una época, en una situación determinada, en definitiva disfrutar, abstraerme al igual que con la lectura de un buen libro.

Esta película, al igual que la pesadez de sus hermanas mellizas (por no decir gemelas) que tratan el tema de “rojos/fachas”, en donde solo se encuentran personajes vacíos: un aprendiz a “cura” vicioso, un “rojo” escondido que sufre, la pareja que huye con la peor de las suertes de las fauces fascistas , el cura facha que quiere acabar con la vida de un niño porque no canta el “cara al sol”…señores esto aburre, es siempre la misma historia.

¿Para cuando una historia de la posguerra en donde no haya buenos y malos, donde no se vea claramente la subjetividad “roja” siempre presente en este vulgar y muy mediocre cine español? ¿porqué cine español casi siempre implica una alusión a la política-basura obsoleta y vacía basada en los conceptos rancios del rojo vs azul?

Esta “cinta”, como algunos de aquí denominan a una película, no presenta un solo personaje con fondo, parecen muñecotes de guiñol: el bueno, el malo, el trasero de la mujer del bueno, el malo disfrazado de cura que viola almohadas, el bueno que se esconde del malo….

En ningún momento hay una sospecha de inteligencia tras un personaje, nada de sensibilidad creíble, nada de entretenimiento.

En un rollo a evitar si estas cansado del mismo monotema.