Paco Martínez Soria interpreta a Rodrigo Quesada, un empresario que moriría o mataría por defender la verdad y el derecho. En fin, lo que viene siendo un cabezota con argumentos.
El caso es que al ir al "Banco Universal" a cobrar un cheque se ve envuelto en un atraco, cuyas consecuencias le enfrentan con la banca internacional, la aristocracia y todo el vecindario. Poco le importa a él, que con la razón por delante y el apoyo de un vecino (José Sacristán) que es abogado novato, va a por todas en una divertidísima sátira que pone a cada cual en su sitio, y la verdad, hay escenaas que sorprende que hubiesen pasado la censura de aquel lejano 1970.Un guión sin fisuras con actuaciones impecables, especialmente de Sacristán, la gran Josele Román y el irrepetible Mtnez. Soria para un retrato de un tiempo que, por desgracia no va a volver.

“Gracias por fumar” gira en torno a un alto ejecutivo de la industria tabacalera, cuya misión es convencer al resto del mundo de las bondades del tabaco.
Obviamente no lo tiene fácil, y menos aún tras liarse con una periodista, y esta le pone al descubierto en la prensa.
A partir de ahí las cosas se le complican hasta el punto de perder su trabajo y su reputación, teniendo que enfrentarse con el poder político.
Por suerte, cuenta con el apoyo de dos amigos (una representante del mundo del alcohol, y otro del mundo de las armas) y con el amor incondicional de su hijo.
La peli está narrada en primera persona, de un modo extraordinariamente dinámico, con un ritmo fuera de lo normal, y consigue ser divertida en todo momento, cosa que nadie diría, teniendo en cuenta el tema que trata.
Supongo que se puede ver de muchas maneras, pero en mi opinión es un elogio de la libertad individual, lo que la convierte en no apta para los tiempos que corren.

Bueno, creo que todos sabemos de qué va esto, yo no sé cuántas veces la he visto ya, y sigo en mis posiciones. La peli va de menos a más, con un primer tramo horrible (el de las brujas) un segundo tramo un poco (insisto: poco) mejor (el del pirado y su esposa amordazada), y luego ya sí, la tercera historia con Antonio Banderas, muy potente y la cuarta, magistral, con Tarantino como Juan Palomo, dirigiendo y actuando en un segmento que salva una cinta mediocre.

Después de hartarme de oír y leer elogios sobre esta cinta, me decidí a verla. Todavía me estoy preguntando porqué. Como documental sobre un caso de abusos sexuales a menores, no aporta nada, porque al final no queda claro si hubo o no hubo caso. Todo parece indicar que hubo asuntos muy turbios, pero al mismo tiempo da la impresión de que todo se salió de madre, incluso parece que hay supuestas víctimas dispuestas a decir lo que sea, con tal de salir en pantalla. Me veo incapaz de tomar partido por nadie, ni por las víctimas ni por los acusados porque todo es un batiburrillo de medias verdades sin pies ni cabeza.
Cinematográficamente tampoco está bien llevado, no hay un orden y los saltos temporales son continuos. Las declaraciones son interminables, y acaban aburriendo al poco rato. De hecho llegas a preguntarte si no será un falso documental, porque parece increíble que nadie pueda dejar registrado para la posteridad la destrucción de una familia.
En resumen, parece un documental para viejas del visillo, y chismosos en general. Desagradable y aburrido.

La película gira en torno a la vida de un heredero al ducado de D'Ascoyne, que tras haber nacido fruto de una relación poco honrosa, en opinión de la familia, se ve privado de sus privilegios.
No dejará de hacer cuanto sea necesario para recuperar sus derechos, incluidos los asesinatos de quienes optan al título antes que él, que por cierto, serán varios y muy creativos.
Busca además, satisfacer sus ansias de desquite por la vida miserable que él y su madre han tenido que llevar, lo cual demuestra en algún momento de la película, cuando dice ¨la venganza es un plato, que los chefs prefieren servir frio", conocida frase que el protagonista ha asumido como lema vital.
El argumento básico sería este, aunque no faltan amoríos, un poco de comedia y algo de melodrama para construir una película entretenida y un tanto cursi (imagino que por el ambiente en que se desarrolla).