Unos buenos actores principales, una trama misteriosa y llena de giros, no cesa, apenas te da respiro, siempre esperas que ocurra algo al volver la esquina, la ambientación es más que correcta, la fotografia en momentos es preciosista, como el campo iluminado con inmensas bombillas. Hay humor, amor, odio, venganza, magia y trucos, amistad, ira, deseo, traición y los rincones más oscuros del alma humana, todo en una sola película que engancha desde el inicio, por que ya te lo dice su protagonista: quiero que estés atento. Y esa es la clave para disfrutar de un film bien hecho, estar muy atento, cada pequeño detalle y sobre todo cada conversación son piezas que encajan a la perfección en un puzzle mágico.
Vale la pena verla, sin lugar a dudas y es de esas películas que al terminar, sales, te paras a pensar y te pones a encajar las últimas piezas que el director te ha dejado al inicio del film, que entonces pasaron desapercibidas pero que son fundamentales.
Una de las mejores películas que he tenido el placer de ver últimamente.

Keanu es de los más malo y oscuro, Emma es un cielo, Michael Keaton genial, Robert Sean Leonard aún no conocía a House y se nota, se pasa de dulce, Kate es quizás un poco insulsa pero en general muy interesante y bien llevada a la pantalla.

La historia no es especialmente original, se parece un poco a algunos westerns de los que ponen en verano, una joven irlandesa tiene un hijo con un maori y al cabo de unos años el abuelo del chico lo secuestra para criarlo. El paisaje, el sonido del rio nos acompañan, explicando que la película habla más de Nueva Zelanda que de cualquier otra cosa. El rodaje se vio salpicado por polémicas varias, problemas entre el director y la protagonista y otras historias que no vienen a cuento. Morton está correcta pero no todo lo bien que ella puede estar, hay momentos en que parece hasta pasiva ante lo que le ocurre y reacciona a veces a destiempo. Sutherland hace un papel interesante, su personaje recibe poco tiempo y menos carño pero se merecía más, sus breves dialogos son curiosos pero casí todo lo dice en sus canciones. El niño es lo mejor de la película, realmente interesante.
A pesar de la belleza del lugar, de la historia, de los personajes y de la aparente pasión (que tampoco es tanta) al guión le falta un poco de vida, algo que nos enganche del todo, quizás un poco más de tiempo en cada personaje y algo menos en el paisaje.
No es maravillosa pero vale la pena verla.

Es de esas películas que odias y adoras al mismo tiempo, hay escenas que se me han quedado grabadas, hay partes del guión que odio pero he reconocer que me marcó mucho esta película y eso siempre es bueno, lo cierto es que la historia es tan extraña y el destino de los personajes tan terrible que no es posible olvidarla del todo. No sabría si recomendarla o no pero al menos advierto que es una película que no deja indiferente a nadie.

Mucho más oscura, de acuerdo que es Inglaterra pero realmente no ven la luz del sol en todo el film. Es una película que futurista que no necesita efectos especiales para meternos miedo, basta con mostrarnos un posible resutado del camino que hemos emprendido a ciegas. Quizás por eso a muchas personas les molestó o les resultó inquietante. Un mundo sin niños, sin esperanza de una nueva generación, donde los extranjeros son el enemigo a maltratar, donde todo se compra y vende menos un reducto de personas que a pesar de todo siguen creyendo en algo. Clive Owen suele brillar en cualquier papel, no es el hombre más guapo del mundo pero tiene una presencia que vale mucho más que la belleza convencional. Me parece un film muy recomendable, deberíamos abrir los ojos y ver que ese futuro no está para nada lejos. Si además se ve luego Gattaca mejor que mejor