Stephen Lang interpreta a un veterano de guerra que simplemente defiende su hogar y fortuna contra tres intrusos. Resulta que los protagonistas que se convertirán en víctimas no son santos, son ladrones y están en grandes problemas. Además, esta película, cambia mas o menos a la mitad introduciendo un elemento clave que nos hace reconsiderar todo lo que hemos visto; algo tan horrible que nuestra atención se desvía y todo lo que damos por sentado se deconstruye

Freddy Krueger, no es el villano promedio, puede doblegar las leyes de la física y vive en un mundo surrealista que él disfraza como el nuestro, las transiciones entre la realidad y los sueños son perfectas.El buen trabajo de cámara no nos deja entrar en la ilusión, por lo que estamos tan desorientados como las víctimas. Freddy sale menos de 10 minutos pero es aterrador y construyo el personaje perfectamente, la persecución final chica/monstruo es de las mejores del slasher. La idea de que ataque en sueños es genial, Jason no puede atacarte en la ciudad (salvo en la parte 8) Tiburón no ta dañara si estas en medio del desierto, pero nadie puede evitar dormir durante una semana seguida menos durante toda la vida, es un aspecto interesante, aunque solo se interese en adolescentes, da la sensación de que nadie esta a salvo si Krueger le pone en su lista.

Tenemos muchos cocodrilos un huracán, muertes necesarias que ayudan hacer que avance la película con victimas, los protagonistas tienen una relación creíble padre e hija, pero es terror todas las decisiones de: A: Me salvo. B: Me meto en problemas, escogen una y otra vez la B hasta siendo una opción totalmente absurda, los cocodrilos estan muy bien hechos.