Vaya peliculita, iba a decir que no servía ni para las sobremesas de Antena3, pero es que esta cadena no sólo ha comprado "esto" si no que además... ¡¡Lo ha programado en prime time!!

La película narra una de las crónicas negras de nuestro país, el desastre del camping de "Los alfaques" en el que murieron cientos de personas.

Pero el recordatorio de la tragedia resulta absurdo, cutre y excesivamente largo. Con una presentación de los personajes que provoca bostezos y falta de interés y un desenlace metido a hinchonazos.

Esta producción alemana no tiene ningún tipo de interés y menos para programarla en horario preferente… mil veces más entretenida la teletienda.

Por cierto...¿¿Qué me decís de ese Camilo Sexto en mini-bañador de Leopardo??

Toda la vida he suspendido matemáticas. Ni me gustaban, ni las entendía, ni nos llevábamos bien...

Recuerdo que la pizarra era una masa de tiza blanca sin orden ni concierto, y como desviase la mirada aunque sólo fuese para mirar la hora, me perdía irremediablemente en la solución del problema.

Pero todo eso ocurría porque jamás me dijeron que con las mates podía ayudar a la policía a detener asesinos. ¡Eso se avisa antes!

Supongo que mi inmadurez me hizo pasa por alto que aquella frase de "el cuadrado de la hipotenusa es igual a la suma de los catetos al cuadrado" era un simple acertijo para descubrir que el vecino del sexto me roba la señal de internet, o que las dichosas raíces cuadradas son un mero instrumento para saber que el carnicero me estafa con el peso de la carne.

Yo, que podría haber sido una gran detective, que habría metido en la cárcel a miles de asesinos en serie (porque si no es en serie lo de las mates falla) me quedé siendo una don nadie, porque en el colegio jamás me confesaron el poder de las matemáticas.


Ahora mismo voy a enviar una carta a la Moncloa para que elimine el cuerpo de policía al completo, y ponga a matemáticos en su lugar, la criminalidad descenderá una barbaridad!

Lo confieso, cuando fui al cine a verla me encantó.

Si, por aquel entonces yo era una de esas personas que se sentaban en el cine y todo lo que veía me gustaba. Salí del cine emocionada "¡Que chula ha sido!" llamé a mis primos corriendo y les dije "Chicos teneis que ir a verla, es chulísima" (Tampoco tenía un amplio vocabulario, la verdad...) Cuando cogía mi gameboy y me ponía a matar tortugas, me reía pensando en la película y es que todo lo que se veía en el cine tenía que ser bueno (ilusa de mi...)

Hasta que mi hermana (aún no se lo he perdonado) me llevó al cine a ver una película francesa en versión original, que me hizo abrazar la idea del suicidio antes que seguir aguantando aquel tostón, y partir de entonces comencé a desarrollar el concepto de crítica cinematográfica.

Pasados los años, volví a ver la película y casi muero del disgusto, y no porque "Super Mario Bros" fuese mala, si no porque en algún momento de mi existencia, a mi me había parecido un peliculón comparable a "Casablanca"

Pero como dicen por aqui, imagínate que te piden que hagas una película sobre un videojuego como el del Mario... pues eso, que no le pidas peras al olmo.

¡¡Vacas, nada más y nada menos que vacas!!

Pensaba que lo había visto todo en materia de terror, que con las ovejas asesinas ya había llegado al límite, pero no, Billy O´brien ha dado un paso más allá y ha convertido tiernas vaquitas lecheras en mutantes asesinos que amenazan con invadir la campiña irlandesa...

En este tipo de películas más que el argumento (que está comprobado que puede ser lo absurdo que se quiera) lo importante es el ritmo, como sabes que no vas a ver una obra maestra sólo esperas pasar un buen rato con el bol de palomitas en el sofá, pero si una película de este tipo se hace lenta y pesada, la hemos liado.

No se puede utilizar como único elemento para causar temor, una penumbra agobiante, una luz agónica falsa para evitar tener que trabajar más en otro tipo de detalles.

Sin duda el momento más agobiante y espeluznante de la película fue el del parto, pero eso es por temores propios, no por que alguien se haya currado el tema de los efectos.

Batante floja y aburrida.

Robin Hood ha dejado atrás los bosques de Serwood para adentrarse en las cálidas calles de Miami, ya no roba a los ricos para dárselo a los pobres, ahora mata a lo malos para limpiar las calles y encauzar su vena sádica.

Con unos diálogos impecables "Dexter" se ha convertido (por lo menos para mi) en la revelación de la temporada. Un idea fantástica, la de un forense que trabaja para la policia que se dedica a matar a aquellas personas que han cometido delitos de sangre y a los que la ley ha dejado escapar. Brillante realización que te captura en cada movimiento de cámara, y una gran banda sonora, en ocasiones desconcertante, que acompañan a este nuevo "sheriff" en un viaje excitante al centro de los más oscuros deseos de un psicópata.

Distante, frio, sexy, calculador y en ocasiones con un puntito tierno, así es Dexter, lo amas o lo odias, pero con él no hay termino medio.