El retrato que se ha hecho sobre la música a lo largo de la historia del cine es realmente significativo, como si estas dos vertientes fueran de la mano.Amadeus es un delicioso film que sabe mezclar con maestría ambas disciplinas. Se sentirá decepcionado el espectador que espere encontrarse con una veracidad biográfica sobre la figura del compositor.

La narrativa es excelente, todo la historia está contada de forma sublime. Es cierto que la versión del director cuenta con el suficiente metraje como para poder desarrollar a los personajes y sus conflictos emocionales, nada menos que 180 minutos. En su favor también hay que destacar que el metraje no aburre, se pasa en un suspiro gracias al tempo y la frescura que impone Milos Forman.

Qué decir de los actores F. Murray Abraham (Antonio Salieri) y Tom Hulce (Wolfgang Amadeus Mozart), ambos están perfectos en sus roles. Los secundarios también dan la talla y completan un reparto que perdurará en el tiempo.

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La película tiene grandes virtudes que han perdurado a lo largo de los años como por ejemplo su colosal fotografía, cuidada hasta el extremo. El Hotel Overlook no había lucido tan bien ni en la mente de King, del cual se adapta la novela, pero también Kubrick sabía que iba a impregnar a la obra de su estilo tan característico.
Jack Nicholson forja uno de sus papeles inolvidables como Jack Torrance, un escritor bloqueado que decide aceptar un empleo para el mantenimiento de un hotel en épocas de aislamiento extremo. Shelley Duval interpreta a su mujer, la cual según avanza el metraje se la nota una evolución de lo más terrorífica, siendo consciente de la locura que invade el lugar. El niño Danny hace una actuación por encima de la media a su edad, dándonos algunos planos completamente impactantes en ciertas fases de la película.

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La historia comienza con un acontecimiento que ya hemos visto en varias ocasiones, el asesinato del matrimonio Wayne. Esta vez, narrada con una gran belleza visual. Snyder que es consciente de que esta historia la conoce gran parte del público, solo se entretiene lo justo y necesario en presentarnos las motivaciones y los miedos del guardian de Gotham.

¿Cómo reaccionaríamos hoy en día si conociéramos la existencia de un alienígena en la Tierra?, un ser con el poder de un Dios. En una escena imponente rememoramos el final de ‘Man of Steel’, esta vez desde la perspectiva de Bruce Wayne.. Una escena necesaria para poder comprender la magnitud y el peligro que supone tener una amenaza del calibre de Superman, aquí las consecuencias del combate son mucho más palpables y más crudas. Entonces, desde ese acontecimiento se empieza a cuestionar si Superman es un peligro para la humanidad.

La idea de tener a Superman como si jugara el rol del Dr. Manhattan (Watchmen) es realmente interesante y le da un punto diferente a la cinta. Esto puede agradar a unos y molestar a otros, sobre gustos ya se sabe. Snyder intenta en todo momento empatizar con los dos protagonistas, haciéndonos partícipes de su evolució: Bruce Wayne es “un hombre sin fe”, 20 años en las calles solo le han enseñado que la escoria no desaparece nunca; Snyder nos regala la encarnación del Batman de Frank Miller, un tipo que piensa que el fin justifica los medios. Clark Kent no confía en que la humanidad lo acepte a pesar de que hace todo lo posible porque se le reconozcan sus buenas intenciones.

Se cuestiona de manera agresiva si Superman puede andar a sus anchas haciendo lo que crea oportuno sin tener que rendir cuentas a un organismo superior que pueda controlarlo. Una adaptación del héroe arriesgada y con mucha personalidad. Nada queda ya del Superman luminoso de Reeve en esta cinta, como ya pasó en ‘MoS’.

Lex Luthor Jr. es un multimillonario que se ha dedicado a reconstruir la ciudad como buen filántropo. Se le ha comparado con el Joker, en nuestra opinión puede recordar por ese aire caótico, histriónico. En realidad pensamos que varias de las decisiones de la película no las tomaría una personalidad tan caótica como el Joker, aquí hay un plan muy estudiado desde el principio. Su objetivo es que los dos superhéroes se enfrenten para quitárselos de en medio.

La primera parte de la trama puede hacerse confusa si no estás muy dentro de la película debido al tipo de montaje, saltos constantes de escenas y una cantidad de información importante. Se centra en las reflexiones de los protagonistas sobre la moralidad que debería tener su rival y ver su día a día. Hay que decir que ayuda conocer cómics como El Regreso del Caballero Oscuro, La Muerte de Superman o Injustice por citar algunos ejemplos. Este último es un punto importante ya que a través de sueños premonitorios vemos como por culpa de la muerte de Lois, Superman reina como un tirano en un posible mundo futuro.

El resto de la crítica: https://cinefilia.wordpress.com/2016/03/28/batman-v-superman-dawn-of-justice/

Damien Chazelle junto a la música compuesta por Justin Hurwitz nos devuelven el regusto por la edad de oro de Hollywood. 'La La Land', ganadora de 7 Globos de Oro, se mete por derecho propio en la historia del cine contemporáneo.

Mucho tienen que ver los dos protagonistas de la película. Tanto Ryan Gosling como Emma Stone están encantadores en sus roles, haciéndote empatizar con ellos en todo momento. Una musical que puede comenzar de forma muy alegre pero que no deja de lado sus tintes de realidad, una más dramática y tangible por los mortales.

Gosling interpreta a un pianista de jazz cuyo sueño es poder abrir su propio local para que la magia de la música que ama no desaparezca jamás. Stone es una actriz que tiene una lucha constante para poder colarse entre las miles de personas que se presentan a diario a castings siendo ninguneados. Casualmente, una noche se conocen y ese encuentro cambiará sus vidas para siempre. Los dos actores desprenden mucha química, es casi imposible que puedas sentir rechazo por ellos. Cada uno se complementa de forma genial con el otro: Gosling donde sobresale es en las escenas de baile donde es un cañón en pantalla; el punto fuerte de Emma Stone sin duda es su voz, destapándose como una cantante más que competente que llena la sala con su encanto especial.

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Con 'Eyes Wide Shut' despedíamos a uno de los grandes de la historia del cine: Stanley Kubrick. Termina con una película compleja, ambigua y complicada sobre las relaciones de pareja. Indudablemente su sello se encuentra por todas partes. Desde los escenarios que beben de su cine más transgresor en algunas fases a la elegancia de los planos con su reconocido ojo de fotógrafo. En esta ocasión la cinta está protagonizada por Tom Cruise y Nicole Kidman, que en ese momento cumplían con el perfil requerido por Kubrick ya que eran pareja en su vida personal.

El guión es realmente interesante, mantiene tu mente despierta si te pones en sus manos. No vamos a desvelar que es un director bastante complicado de asimilar y eso citando sus películas más conocidas: La Chaqueta Metálica, El Resplandor, La Naranja Mecánica. Son algunos de las muestras de su estilo de cine, muy potente a nivel visual.A nivel de dirección no se puede decir más que presenta una factura impecable, una Nueva York recreada en Londres sin que nos lo preguntemos ni un solo segundo.

Tanto Cruise como Kidman estan fantásticos en sus papeles, transmitiendo de una forma auténtica como afrontan los conflictos a los que son puestos a prueba. La película tiene momentos muy "de Kubrick" como la visita a la mansión donde el personaje interpretado por Cruise es descubierto por una suerte de secta con tintes sexuales, todo adereza con una música de lo más inquietante que enrarece el ambiente.

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