INJUSTICIA 1: entre multinacionales de dudosa legalidad, no hay legislación anti fraude que valga... como todos son tramposos, uno tapa al otro, amenaza, negocia, oculta, falsea, compra auditores y, al final, se cierran operaciones que, visto lo visto, son imposibles de destapar en su parte más fea.
INJUSTICIA 2: la policía que, intenta atrapar un pez gordo, se salta olímpicamente los derechos de un ciudadano (en este caso, negro y de Harlem); plantando pruebas falsas. Está bien que luchen por cazar a los culpables pero, es inadmisible que sea a costa de los derechos civiles y saltándose la legalidad más elemental. Y entonces, diréis que por qué hablo de injusticia ya que... se descubre el pastel y evita la condena... Sí pero: porque tiene el respaldo de un millonario con abogados caros que pueden presionar y obtener pruebas de la manipulación de la foto... Si llega a ser un pobrecillo negro de Harlem sin amigo millonario... al hoyo fijo.
INJUSTICIA 3: que la misma mujer que ha estado gastándose dinero a puñados en gimnasios, entrenadores, ropa, muebles, donaciones filantrópicas para lavar su conciencia y sentirse mejor... sin preguntar nada, sin querer saber sobre el origen de la pasta o, de la legalidad de los negocios, de repente...se sienta hiper ofendida porque su marido que, siempre ha sido así, tratando de defender su modo de vida, le oculte a la hija las estrategias oscuras del negocio. Está claro que metió la pata. Que hizo trampas pero... es normal que ante semejante marrón, trate de arreglarlo y de que a su hija no le deriven responsabilidades por sus trampas. En un mundo así, es inverosímil que, su mujer, de pronto, se vea trastocada por una mentira más, un truco más... cuando sabía de sus infidelidades y, miraba para otro lado porque era más cómodo no saber demasiado sobre el origen de su elevado nivel de vida. Es injusto que, además... todo eso se resuelva "moralmente" desplumándole. Oséa que, la ofensa con unos milloncejos, se tapa y se olvida.
INJUSTICIA 4: hay una persona muerta que no le importa nada más que a su madre. Gere la quería mucho... y, comprándole unos cuadros y pagando el funeral deluxe, la compensa por haberla matado... qué frialdad...
De la muerte económica y moral más absoluta, pasamos a un "todo queda tapado" y, a seguir de reunión en reunión, de restaurante a cena benéfica y, a mostrar una imagen idílica que, oculta las historias más retorcidas. Lo peor es que, esto se repite en todos los niveles de vida. No podemos quedarnos es eso de que "son cosas de ricos"... adecuado a cada capa social... la justicia se diluye tanto...