Corren tiempos en los que cada vez es más difícil hacer una crítica de un film. Si nos atenemos a lo que vemos, el film es fallido. Aparte de un virtuosismo visual, a veces gratuito, interpretaciones inexistentes, sólo presenciales, el film no cuenta nada de esa familia: Una abuela/asistente sin psicología ni definición del personaje; una madre presencial pero igualmente desdibujada en fiestas, excursiones etc pero de la que no sabemos nada de lo que siente ni del conflicto con su marido.Una sirvienta inexpresiva puro "amor/roma" hacia los niños. El padre es el mejor personaje, por su ausencia; ( nada que ver con ese portento cinematográfico que es "El Sur") .Entra el coche en el callejón, aparece fugaz en su despedida en su viaje a un "congreso", fugaz en la calle y fugaz, en el hospital. Moraleja: no es necesario para la historia, si no fuera por su participación en el acto de la procreación de esos vástagos. El otro hombre de la historia, un pirado de las artes marciales, que como es lógico tampoco mantiene ninguna relación de afecto con la mujer, mas allá de su estúpida exhibición de artes marciales en pelotas.El contexto sociopolítico un marco decorativo vacío de significación.
La única frase significativa de todo el film: "Estamos solas". Por ello ¿por qué la próxima Navidad no montamos el Portal de Belén sin San José", realmente no es necesario como nos muestran los evangelios.
Nunca comentaría este film si no fuera por la perplejidad de los tiempos que corren y por la sobreabundancia de premios. Llego a creer, en una sobre estimación megalómana, que la crítica actúal no tiene ni idea de lo que es un buen film y que no ha visto nada de la historia del cine. O lo que sería peor, la ideología de género de estos tiempos les determina el qué decir.