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España España · Cáceres
Voto de Tiggy:
6
Fantástico. Acción. Aventuras Tras la ruptura de un acuerdo milenario entre la humanidad y ciertos poderes invisibles, el infierno en la Tierra está cada vez más cerca. Un líder despiadado decide traicionar a sus ancestros y organiza un ejército de criaturas diabólicas. Sólo un gran héroe podrá derrotar a este ejército. Se trata de Hellboy. Con la colaboración de la Agencia de Investigación y Defensa Paranormal, Hellboy viajará entre dos mundos, combatiendo seres ... [+]
21 de julio de 2020
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Tras una mediocre primera entrega y cuatro años después, cargado de más experiencia, Guillermo del Toro continúa su fantasía infernal retomando a su chico favorito para mejorar sustancialmente el resultado dando rienda suelta a su estilo personal. Hellboy 2: El ejército dorado funciona como secuela relatando un episodio que se remonta hacia las épocas bélicas y oscuras de la humanidad, desde donde se traza una línea conductiva hasta el tiempo donde se desarrollan los hechos, donde Hellboy (Ron Perlman) y compañía tendrán que poner una solución definitiva ante las intenciones de despertar una maquinaria ancestral indestructible que el príncipe de los elfos, Nuada (Luke Goss), desea para poner fin al confinamiento de las criaturas mágicas en el mundo instigado por el pacto que hizo su padre con los hombres.

Muy experimentado y adquiriendo un renombre inquebrantable en la industria cinematográfica, Guillermo del Toro, con la colaboración del ilustre artista y escritor estadounidense Mike Mignola (creador de las novelas gráficas en las que se basan las películas), crean una gratificante película de acción y fantasía, con algunos elementos de terror y una clara narración de aventuras, creando un imaginario mundo de criaturas y engendros sellados por la mente del director mexicano, con, por supuesto, la ayuda de uno de los amores de del Toro: los monstruos de Hammer Productions con los que se crió.

Cimentándose en los géneros anteriormente citados, y con el tono tétrico casi onírico que maneja el director, se hace una estupenda y divertida aventura de dificultad gradual para sus protagonistas hasta llegar al jefe final, superando con creces tanto en este aspecto, como en acción, como en fantasía a la anterior entrega. A pesar de que los fallos que acarreaba Hellboy (2004) los arrastra con un peso más liviano esta, del Toro se dio cuenta e intentó enmendarlos con un relato que tuviera el mismo carácter lúdico para todos los públicos, pero amplificando el volumen de los altavoces para elevar las dimensiones del show, olvidándose de tanta subtrama histórica-fantástica anodina e insustancial para centrarse en los aspectos que llevan al espectador a visualizar este tipo de superproducciones.

De la misma forma, el mexicano también es capaz de introducir mensajes llenos de buenos modales y utopía que, al igual que en anteriores producciones como El laberinto del fauno (2006), casan a la perfección con la estética de ensueño que mezcla las luces y las sombras del mundo. Aunque sea tópica, la crítica esbozada hacia la naturaleza codiciosa y corrupta humana que desea superar a dioses y naturaleza a base de arrogancia y poder trasciende pura gracias a una construcción adecuada del antagonista principal, el príncipe Nuada. Por otra parte, Hellboy trae bajo su rocoso brazo el mensaje de la posibilidad de convivencia y redención entre especies y razas, aunque unos vapuleen a los otros por miedo hacia lo desconocido, que vierte en un odio irracional difícil de tratar. Algo que del Toro, por su condición de mexicano en EE.UU. comprende muy bien. Aún así, la integración es posible a partir del amor, desde donde entra en juego los romances que sustentan gran parte del argumento.

El guión lineal bien planteado que mece los cambios de espacio casi constantes por los que del Toro y gracias a la bonita fotografía de Guillermo Navarro nos pasea por las oscuras calles de Manhattan, el idílico mundo subterráneo de los elfos, el bullicioso mundo de los troles o las imponentes vistas naturalistas del último tramo sirve para una descomposición pieza a pieza del universo creado por Mike Mignola, algo que nos sirve para conocerlo mejor e involucrarnos más con las dimensiones épicas de la aventura de Hellboy. Ese factor también es servidor para mostrar las impresionantes labores de efectos especiales, maquillaje (por la que fue nominada al Óscar) y diseño de las criaturas que pueblan los escenarios, con un despliegue técnico brutal que nos sumerge de lleno en la cálida fantasía de del Toro. Los diálogos con algo más de seso escriben las líneas principales de la aventura, títere de las relaciones interpersonales fundamentadas en el afecto que mantienen todos y cada uno de sus extraños personajes. Por todo ello, ya supera con creces la anterior entrega.

Una excelente puesta en escena de personajes antiguos y, especialmente, nuevos como el elenco de elfos o el estrambótico ocultista alemán Johann Kraus (Seth MacFarlane) son recursos imprescindibles para entender los conflictos internos que mueven a sus personajes, las decisiones del bien o el mal, el discernimiento entre el egoísmo o la pluralidad, que conllevan Hellboy y Abraham Sapien (Doug Jones), al cual se agradece el protagonismo dado en esta nueva premisa. La escena retrospectiva para explicar el conflicto en el preludio, aún estando muy forzada, funciona para ponernos en antecedentes, conocer un mínimo el pasado de Hellboy y la relación con su padre Trevor Bruttenholm (John Hurt), humanizando más si cabe su figura.

La increíble banda sonora a manos del veterano Danny Elfman marca el ritmo de la historia, agregando esos tintes lóbregos y luminosos que hacen de doppelgänger para sus personajes, sumando puntos a la ambientación, la atmósfera y la evolución psicológica de los protagonistas. A pesar de las grandes cotas de efectos especiales que portan los actores, el elenco cumple con las expectativas, sin mucho que remarcar. Aunque me ha gustado especialmente Luke Goss.

Un buen filme de aventuras que mejora muchísimo respecto a su anterior, sabiendo dar tanto a los espectadores como a los fanáticos de los cómics de Mike Mignola una historia digna llena de acción, adefesios biológicos y evolución adecuada de sus emblemáticos seres, aún teniendo que recurrir muchas veces a deus ex machina para solventar nudos, funciona correctamente dando voluminosas dosis de emoción y entretenimiento. (6.5).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Tiggy
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