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Voto de Jose Solo Z:
50,465
Bélico. Aventuras
Durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), un grupo de prisioneros británicos son obligados por los japoneses a construir un puente. Los oficiales, capitaneados por su flemático coronel, se opondrán a toda orden que viole la Convención de Ginebra sobre los derechos y las condiciones de vida de los prisioneros de guerra. (FILMAFFINITY)
14 de abril de 2020
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Gran espectáculo.
Un clásico del cine, en general, y del bélico, en particular. Normal que tuviera éxito, lo tiene todo:
Historia absorbente y con la que acabas empatizando.
Guión brillante y muy bien llevado. Alternando tensión con tranquilidad y algo de humor. La mitad de la película es la vida en un campo de prisioneros y la misión que ellos han elegido. La otra mitad arranca en un cuartel y, desde allí, otros personajes eligen su propia misión.
Toca temas de calado intelectual: el sentido de nuestra vida y de nuestro tiempo, el deseo de hacernos mejores, el espíritu creador y artístico del hombre, el entendimiento, el pundonor y orgullo por el trabajo bien hecho, la disciplina o el patriotismo. Pero también la locura, el realismo cotidiano y resabido del que ha pasado ya por mucho...
Fotografía bonita, espectacular por lo grandiosas que son las tomas. Tiene el sabor y la grandiosidad de las grandes producciones.
Rodada con muchos extras en una localizaciones perfectas. Mimo por respetar escrupulosamente la posible vida en un campo de prisioneros japonés sin caer en el morbo o en lo gore.
Buen elenco de actores, destaca Guinness pero Holden o Hayakawa están muy bien. Miradas penetrantes y expresivas.
Personajes inolvidables. El oficial enamorado de su obra (cual Pigmalión), el honorable y disciplinado jefe japonés, el americano enrollado y realista...Y, por supuesto, el puente.
Banda sonora vibrante. La sintonía del silbido en la secuencia de entrada forma ya parte de nuestra memoria cinéfila. ¡Y de la cotidiana, también!
Cierta acción e intriga, sobre todo en la segunda parte del film.
Un clímax final muy bueno, con mucha intensidad y con unas vibrantes actuaciones de los dos personajes luchando entre sí. Totalmente realistas. Es la guinda a la historia de superación y pundonor que sobrepasa la lógica y las banderas. En este caso el epílogo de Holden es tan acertado, como rotundo. Lo interpreta muy bien.
Gran película ¿bélica? Por la ambientación, sí. Por la trama, tal vez. Pero lo que me parece es una declaración optimista de que en el peor de los escenarios, el ser humano encuentra y da sentido a su vida. Si quiere dárselo, claro.
Un clásico del cine, en general, y del bélico, en particular. Normal que tuviera éxito, lo tiene todo:
Historia absorbente y con la que acabas empatizando.
Guión brillante y muy bien llevado. Alternando tensión con tranquilidad y algo de humor. La mitad de la película es la vida en un campo de prisioneros y la misión que ellos han elegido. La otra mitad arranca en un cuartel y, desde allí, otros personajes eligen su propia misión.
Toca temas de calado intelectual: el sentido de nuestra vida y de nuestro tiempo, el deseo de hacernos mejores, el espíritu creador y artístico del hombre, el entendimiento, el pundonor y orgullo por el trabajo bien hecho, la disciplina o el patriotismo. Pero también la locura, el realismo cotidiano y resabido del que ha pasado ya por mucho...
Fotografía bonita, espectacular por lo grandiosas que son las tomas. Tiene el sabor y la grandiosidad de las grandes producciones.
Rodada con muchos extras en una localizaciones perfectas. Mimo por respetar escrupulosamente la posible vida en un campo de prisioneros japonés sin caer en el morbo o en lo gore.
Buen elenco de actores, destaca Guinness pero Holden o Hayakawa están muy bien. Miradas penetrantes y expresivas.
Personajes inolvidables. El oficial enamorado de su obra (cual Pigmalión), el honorable y disciplinado jefe japonés, el americano enrollado y realista...Y, por supuesto, el puente.
Banda sonora vibrante. La sintonía del silbido en la secuencia de entrada forma ya parte de nuestra memoria cinéfila. ¡Y de la cotidiana, también!
Cierta acción e intriga, sobre todo en la segunda parte del film.
Un clímax final muy bueno, con mucha intensidad y con unas vibrantes actuaciones de los dos personajes luchando entre sí. Totalmente realistas. Es la guinda a la historia de superación y pundonor que sobrepasa la lógica y las banderas. En este caso el epílogo de Holden es tan acertado, como rotundo. Lo interpreta muy bien.
Gran película ¿bélica? Por la ambientación, sí. Por la trama, tal vez. Pero lo que me parece es una declaración optimista de que en el peor de los escenarios, el ser humano encuentra y da sentido a su vida. Si quiere dárselo, claro.
