No conocía esta película, y me ha emocionado mucho. Estamos pasando un año complicado, y necesitamos tanto películas de reír como sentimentales, para poder sacar fuera nuestras neuras, reír y llorar, y olvidarnos por un rato de nuestra realidad. En este caso, el guión es sencillo, los personajes nada complicados, hay trozos para reír mucho, y trozos para llorar con los protagonistas...Y lo mejor, ¡unos actorazos como la copa de un pino...! Diego Peretti está genial, muy simpático, y los demás actores, son bárbaros, incluidos los niños, sobre todo el casi protagonista, Antonio (Andoni Hernández). Y me ha hecho mucha gracia ver al actor de Perdidos, Jorge García, le da un toque exótico a la película, es un plus. Por todo lo dicho, os recomiendo esta sencilla película... nada más y nada menos .