En un estado totalitario de izquierdas, esta sería una peli perfecta de entretenimiento para el domingo por la tarde.

Si hay algo que me repugna en una película, es que traten de adoctrinarme. Y esta lo hace a raudales. No he visto una cosa más "zapateril" de película en mi vida. Desgraciadamente, el cine lo hacen las personas, y las personas suelen tener tendencias políticas. Esta peli tiene hasta "talante".

Si habéis leído la sinopsis, sabréis que la cosa va de que la familia Stone decide que la novia de su hijo mayor, a la que han invitado a pasar las Navidades con ellos, es una pija insufrible. Lo gracioso es que esto lo deciden en cuanto ella entra por la puerta, y a partir de ahí la odian. La pobrecita ya no levanta cabeza en toda la película, porque no le dan la menor oportunidad.

Esta cinta es un alegato en contra de la educación y las buenas maneras. La familia Stone se caracteriza porque todos sus miembros son "guay": relajados, naturalotes, sexualmente muy abiertos y muy sanos, librepensadores, y sobre todo INTOLERANTES. Nadie lo dice, pero el espectador puede imaginar que los Stone son demócratas, y, claro, Sarah Jessica Parker hace de republicana. Ojo, yo siempre he defendido unos USA demócratas, pero es que lo de esta película es mucho.

La odian porque es educada, trata de agradar, mide sus palabras, carraspea por inseguridad... ¿Como se puede odiar a alguien por cosas así? La consideran una estirada,una homófoba y una fascista, y el único defecto de esta chica es que tiene poco mundo, es un poco ignorante y tiene muy baja la autoestima.

Hacia la mitad de la peli, uno está totalmente atrapado por ella, porque piensas: ¿Se relajará la chica y se volverá uno de ellos, triunfando así el ideario libertario? ¿O se pondrá de manifiesto lo gilipollas que son todos en esa familia?

No os lo digo. A verla.