Creía que lo había visto todo en cuanto a películas malas, después de ver "Kilómetro 666" pensé que ya nada me podría sorprender, que ingenuo. Legión trata del apocalipsis, un apocalipsis un tanto patatero en el que Dios, harto de la maldad de los hombres (supongo que estará harto de eso porque en la película tampoco especifcan mucho más) envía a sus "ángeles" a acabar con la humanidad. Hasta aquí todo bien, la idea en si misma dá para una buena película y desde luego llama la atención, pero si se hace bien y con algo de sentido. No es el caso. La película es un cúmulo de despropósitos, uno tras otro, situaciones absurdas que rallan la parodia con personajes totalmente planos y estereotipados a más no poder.

Tenemos al chico enamorado de la chica, al típico afroamericano graciosete, a otro afroamericano "malote" a la niña tonta hija de dos horteras y al omnipresente Denis Quaid (quizá algún día haga alguna buena película) que hace el papel de padre del chico enamoradizo. Por otra parte están los "ángeles". El ángel Gabriel, el ángel Miguel (en la película Michael) que resulta que son generales del ejército de Dios. Sí sí, Dios, en Legión, tiene un ejercito de tíos súper malos compuesto por gente normal y corriente poseída. Eso sí, son unos hachas al volante y aún cuando no son capaces casi de caminar conducen que ya le gustaría a muchos pilotos profesionales.

Los diálogos son absurdos, en ningún momento consiguen meterte en la trama (quizá porque no la hay) y hacen que odies profundamente a todos y cada uno de los personajillos de la película. En cuanto abren la boca estás deseando que se callen ya o mejor aún, que se mueran de una vez para que el bodrio que estás viendo se acabe ya. Espero que los guionistas de esta película no se vuelvan a atrever a escribir nunca más.

La ambientación es de lo más triste, toda la película se desarrolla en uno de los míticos restaurantes de carretera situados en medio de ninguna parte que solamente al personaje de Denis Quaid se le ocurriría abrir, que grande eres Denis. En ningún momento consigue sobresaltarte, ni siquiera te llevas un susto pequeñito, es más difícil saber que después del 2 viene el 3 que intuír lo que pasará a continuación.

En resumen, una película mala mala en todos los sentidos desde el primero hasta el último minuto, digna del infame Uwe Bold. Sólo la recomendaría en caso de fiesta con los amiguetes para echarse unas risas viendo semejante oda a lo absurdo. En cualquier otro caso, por favor, ahórrate la hora y media y empléala en hacer algo más productivo, como no sé, ¿sacarte mocos de la nariz? sí, seguro que es más provechoso.