'Rebeldes' (su título original, 'The outsiders', refleja mucho mejor lo que la película significa), está basada en una de las dos novelas de Susan Eloise Hinton que Francis Ford Coppola dirigió en el mismo año (1983), la otra fue 'Rumble Fish'. La autora escribió la novela, del mismo nombre que la película, con 19 años, con lo que queda claro que conocía muy de primera mano el tema sobre el que escribía.

Después del desastre económico que para Coppola, como productor, supuso su film anterior, 'Corazonada', se dijo que tomó el proyecto de 'The Outsiders' como algo alimenticio, pero, a tenor del resultado, se puede comprobar que en absoluto fue así, estamos ante una película que supuso la guía del trabajo posterior que surgió tratando el mundo de las pandillas juveniles. Por otra parte el director lanzó en este trabajo la carrera de unos jovencísimos actores que con posterioridad se convirtieron en estrellas, unas de más largo brillo que otras.

El retrato de la adolescencia y primera juventud que el director nos presenta es toda una tragedia de tintes shakesperianos, si bien Coppola infunde a su obra un lirismo que, en algún momento y para algunos, puede ser algo excesivo y llegar a ser incluso ñoño. A fin de cuentas, tenemos ante nosotros no solo una historia de críos, sino de verdaderos seres humanos que a lo largo de su vida verán cambiar sus circunstancias al tiempo que ganarán en experiencia, pero su esencia, su condición humana, será siendo la misma que ya desarrollaban entonces.