Esta película nos hace conectar sobre todo a las personas que han sido o son oficinistas, como ha sido mi caso.

Hay que entender que no se trata en sí del sector, sino la forma de hacer las cosas que tienen sobre todo las grandes empresas, y da la casualidad de que estas formas de hacer se dan particularmente en el sector de la administración, contabilidad e IT, siendo este último caso el de la película.

Horarios rígidos, de 9 a 5, en el que prácticamente estás o debes estar sentado durante 8 horas frente a un ordenador, exceptuando los momentos que vas al baño o tomas el café mañanero con los compis. No hay siempre algo que hacer, pero no puedes levantarte e irte, desde que te están pagando, por lo que te quedas ahí sentado y miras por la ventana, a la pantalla, escuchas música o haces cualquier otra cosa.

Las grandes empresas tienen sucursales aquí y allá, y eso hace que prácticamente nunca estés en contacto con el empleador o socio de la empresa, sino con otros empleados en una estructura fuertemente jerarquizada. Estos son los "jefecillos" o "middle level management", que no dejan de ser empleados pero con la facultad de gestionar el personal. Lo que se muestra en la película sobre reportes y memos es totalmente cierto. Estos "jefecillos" se dedican sobre todo a la gestión de personal, a dirigir y coordinar el trabajo de los empleados en la parte más baja de la jerarquía. Cuando digo dirigir y coordinar, me refiero a solicitar a estos empleados. informes de trabajo, recuentos de horas, historial de esto, de lo otro. En resumen, hacen poca cosa o nada productiva para que la empresa en cuestión haga beneficios. Los empleados en la parte más baja de la jerarquía hacen dicho trabajo, y estos "jefecillos" supervisa y coordina su trabajo solicitando un montón de estupideces que valen para poca cosa.

Y sin olvidar los códigos de vestimenta. Traje y corbata para los hombres. ¿Por qué? Odio el traje, odio la corbata, odio la americana, y mi trabajo de oficina solo me hizo odiarlo más. Es necesario una vestimenta formal y discreta, pero de nuevo, ¿por qué traje?

Todo lo descrito hace que en estos ámbitos te conviertas en un autómata sin vida ni alma que solo vive para el fin de semana y que odia su vida. Odias el lunes, llegas al trabajo, y saludas y sonríes de forma forzada, porque ese lugar es el último sitio en el que quieres estar. Es lunes, es martes, entre semana vives para que llegue el fin de semana. El viernes y el sábado estás contento, y el domingo agobiado y deprimido por tener que volver a un sitio que odias.

Yo estuve ahí. ¿Hay alternativa? Las hay. ¿Por qué nos cuesta tanto dejar estos sitios? Lo primera razón es evidente, el dinero. Sin embargo, siempre puedes dejar un empleo a cuenta ajena por otro, o hacer cualquier otra cosa, aunque tu renta mensual disminuya. Pero hay otra razón más:1, las personas que han llegado a estas empresas les ha costado llegar a ese sitio, y piensan:¿estaré exagerando?¿Con los años llegará a ser mejor? y 2, la presión social, la validación externa que la sociedad otorga a los empleos "white collar" de traje y corbata, y el menosprecio que hace a otro tipo de trabajos, por ejemplo, los manuales o "blue collar".

En conclusión, si sufres trabajando, si entre semana solo vives para que llegue el fin de semana, si cada día de trabajo es un tormento, es hora de dejarlo y pasar página, y el tiempo que sigas permaneciendo ahí será una pérdida de tiempo.

Volviendo a la película, me causó una extraña mezcla de sensaciones por lo comentado, me hizo reír pero también me hizo sentir amargura. Para mí lo mejor de la película son las primeras dos partes, ver las situaciones cotidianas en la oficina que tan familiares se nos hacen a los oficinistas (o ex), y la similar situación que viven Peter y Joanna, pero para mí pierde un poco la gracia cuando comienza el "plan" de los oficinistas.

Ya tengo ganas de leer de nuevo esta crítica en algunos años. La primera vez que vi la película fue mientras seguía en mi trabajo de oficinista, y escribo esta crítica cuando ya estoy en proceso de salir de ahí. Ahora me gustaría leer de nuevo esta crítica en algunos años y recordar la amargura de aquella época con su posterior liberación y felicidad, y la apertura de nuevas y emocionantes oportunidades.

¡Gracias por leer y me encanta esta película!

- Zacone