-Con el título de mi crítica puedo resumir la mala impresión que me causó este pésimo filme. El punto de partida del argumento no está nada mal e incluso se podría considerar interesante pero el filme desde un primer momento aburre y se empantana a cada segundo, con un ritmo lentísimo y extremadamente aburrido. Los chistes son pobres a más no poder y ninguno hace ni la más mínima gracia. La banda sonora contiene un montón de canciones infantiles, todas ellas repelentes y que hacen que te tires de los pelos. Al final acabas odiando el filme, después de tanta tortura con las cancioncitas de los cojones y de ver a esos muñequitos supuestamente simpáticos y cuya repelencia solo es comparable a los ewoks de Star Wars.

En lo referente a las interpretaciones, Gene Wilder efectúa una buena interpretación pero no tiene ni de lejos el carisma como para llegar a cogerle cariño a su Willy Wonka, resultando una actuación por momentos correcta pero desde luego nada brillante. Jack Albertson se muestra correcto y el ya anciano Peter Ostrum desempeña para mi la mejor actuación del filme, con un personaje carismático e interesante y desde luego de lo poco salvable del film. En cuanto a los apartados técnicos, su banda sonora causa verguenza ajena tras escuchar esas canciones tan pasadas de moda, tan anticuadas y en definitiva, tan malas.

En fin, un filme que me decepciona por completo ya que esperaba una película familiar como el magnífico remake de Tim Burton (mil veces mejor), no un descafeinado filme infantil y aburrido que dudo por completo que pueda llegar a entretener como mínimo a los menores de 7 años. Adultos y gente sensata, abstenerse si no quieren sufrir un desparrame de sesos por todo el suelo tras tener que aguantar este pastiche con su típica y a la vez tópica moraleja superficial.

·LO MEJOR: el personaje del abuelo.
·LO PEOR: el resto ya está dicho.