La empecé a ver porque leí que Alec Guinness estuvo aquí muy bien como actor, y yo yerminaba de ver Star Wars 4 y quería ver por qué es un actor celebrado, es decir, personalmente no me interesaba si había ganado el Oscar por esta película. Básicamente, es un tedio impresionante, he estado haciendo otras cosas mientras trataba de verla y a veces la he pausado, pero no en los momentos Obi Wan y el japonés al mando, y no porque fuera aburrida o por la manera cómo se retrataban a los japoneses, que para los tiempos que corrían por entonces hoy día perdona cualquier cosa cuando ya han pasado por lo menos 40 años de esto, así que no voy a hablar de si los nipones son malos o no o si los ingleses son mejores o no. No pude terminar de verla, cuando se presenta a cierto actor de buenas con una chica en la playa mi actitud me dijo basta y me quedé a un tercio del final, por desgracia, este film es de estos productos antiguos que por ser antiguos están pasados de moda o han envejecido mal, es tediosa a más no poder a pesar del carisma que Obi Wan le aporta a su personaje, pero no es suficiente. El japonés al mando de la construcción del puente, de nombre Saito, hace que mi tedio se pregunte por qué estoy pasando el tiempo así de lo interesante que parece ser. Le pongo un 5 porque estamos en el siglo XXI... y por la inolvidable cancioncita.