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Voto de Lafuente Estefanía:
7
Western Oregón, 1868. El sargento Emmett Bell (Jeff Chandler), jefe de la policía india, es el encargado de mantener el orden en la reserva entregada a los indios después de la firma de un tratado de paz. Cuando el ejército pretende atravesar ese territorio, algunas tribus se unen para la guerra. (FILMAFFINITY)
27 de marzo de 2021
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
El título de la cinta "Las columnas del cielo", que alude a las montañas sagradas de los indios, nos ha recordado al de la famosa novela histórica de Ken Follet (1989). Si en esta se trata de la construcción de una catedral, en aquella de una modesta iglesia en la reserva india de Oregón en 1868. En ambos casos nos movemos en un entorno eminentemente religioso.
Y es que estamos ante un western donde la religiosidad está muy presente. De hecho el reverendo y también médico Joseph Holden (magnífico Bond), juega un papel que compite en protagonismo con el del sargento Emmett Bell (Chandler). En su modesta misión ha convertido al cristianismo y ha bautizado con nombres bíblicos a casi todos los indios de la reserva que le están agradecidos por la ayuda y por los cuidados que en todo momento les presta.
El problema viene cuando aparece un coronel de ingenieros, Edson Stedlow (Bouchey) que ha construido un puente y quiere levantar un camino que atraviese la reserva rompiendo así el acuerdo que habían firmado. Naturalmente se oponen tanto Emmet, como Holden o como veteranos del tipo del sargento Lloyd Carracart (Marvin).
En un intento de frenar el proyecto, el reverendo consigue convocar a todos interesados a una reunión donde los indios defienden con argumentos la solidez de su postura, "Como amigo trae la verdad", exigirán de buenas a primeras. El más beligerante es el jefe Kamiakin que acude armado: "He salido de caza porque alguien quiere cazarme a mi". Holden quiere templar los ánimos, "He aprendido a andar sin hacer ruido", y encuentra el apoyo de algunos indios de la reserva que reconocen en un frase con mucha miga: "Ya no sabemos vivir sin el hombre blanco, comemos su comida, bebemos su whisky, usamos sus armas, tomamos sus medicinas".
El tema es interesante y está bien tratado. El guion ciertamente es desordenado y hay saltos bastante extraños. Algunos personajes están magníficamente retratados, como el reverendo o el coronel, otros sin embargo se tratan con gran superficialidad. Y es que la trama sentimental es muy floja. Un clásico triángulo amoroso pero muy desigual como indicamos en spoiler, si bien con un final que salva la cinta por no seguir el camino que todos barruntábamos.
Correctas interpretaciones donde sobresale el fordiano Bond. Destacamos las escenas de acción, los diálogos y las bromas entre la soldadesca. En resumen, un buen western del subgénero religioso.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Lafuente Estefanía
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