Antes de nada, que quede claro que Penélope Cruz en esta película está muy por encima de cualquier otro aspecto de la película. Me ha podido gustar más o menos, he podido encontrar muchos fallos a esta película y también algunos aciertos, pero sus ocho últimos segundos conmueven sinceramente y a pesar de todo. Vale la pena ver la película entera por disfrutar de sus ocho últimos segundos. No sé para quién ha pensado Pedro esta película, pero en mi opinión siempre la respetaremos muco más o solamente los que conocemos a Pedro de toda la vida, los que hemos visto crecer y menguar a su madre. No puedo criticar los fallos de esta película por respeto a Pedro. Prefiero decir que por un momento me recordó a Terence Malick.