Dieta mediterránea es una comedia española funcional que sabe transmitir el amor por la cocina pero que carece de regularidad en su trama romántica y de aportar carácter al género.

Olivia Molina se entrega a su papel protagonista transmitiendo buen rollo y personalidad además de una fantástica química con sus dos partenaires masculinos, Paco León y Alfonso Bassave. Se ha de decir que los personajes masculinos se encuentran peor escritos y como ya he mencionado, la trama entre ellos tres es irregular y poco creíble en muchos momentos.

Una película sin más intención que la de crear una agradable comedia que sabe transmitir amor por la cocina pero que no dejará un regusto demasiado duradero en el cinéfilo habituado a consumir cine.