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Voto de SebitasDm:
3
6.1
18,714
Thriller. Intriga
En una fría noche cerrada de invierno, en mitad de una carretera despoblada, un furgón policial blindado es asaltado durante un traslado de presos. Alguien busca a alguien de su interior. Martín, el policía conductor del furgón, consigue atrincherarse dentro del cubículo blindado con los reclusos. Obligado a entenderse con sus enemigos naturales, Martín tratará de sobrevivir y cumplir con su deber en una larga noche de pesadilla en el ... [+]
31 de enero de 2021
45 de 66 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película, en su planteamiento, podría parecer interesante: puede dar juego el traslado de un variopinto grupo de reclusos a través de las frías y solitarias carreteras nacionales de nuestra querida piel de toro. Además, Javier Gutiérrez y Karra Elejalde suelen ser una garantía de calidad en el apartado interpretativo. El problema viene aproximadamente transcurrida la media hora, cuando el guion y demás detalles de la trama empiezan a desvelarse. No hay más remedio que comentarlo en spoilers, pero para resumir: estamos ante el enésimo producto patrio de Netflix que es plano, poco creíble y no aporta nada.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Algunos ejemplos de detalles que me sacan de la película:
- ¿El grupo de presos puede contener más estereotipos criminales? El típico mafioso rumano que te puede partir las piernas con la mirada, el típico yonki (dicho sea de paso lo falsa que queda la voz del actor intentando imitar el timbre de un drogadicto), el típico cani (en un destello de originalidad le llaman “El Nano”, espero que Patrick Criado no se encasille en estos papeles), el típico delincuente multiusos y listillo que se las sabe todas y en el culo puede esconder material para abrirte una celda, el típico delincuente latino que no para de decir “brodel” e “hijueputa”...y un señor mayor, porque alguien tiene que morir el primero.
- Cuando Javier Gutiérrez va a rescatar a su compañero, Karra empieza a dispararles con su fusil de francotirador. Las balas rebotan alrededor de Gutierrez, pero este apenas se inmuta. Lo creíble hubiera sido hacer algún tipo de aspaviento a modo de sorpresa, echar el cuerpo a tierra o salir corriendo.
- El tema de la niebla: no queda realista, a veces es poca, a veces es mucha, es muy selectiva. Entiendo que demasiada niebla no quedaría bien en pantalla al no verse lo que está pasando, pero esta niebla parece muy artificial, apta para un videoclip de música pop de los años 80, pero no para el caso que nos ocupa.
- El Nano amenazando a 5 tíos con la culata de un extintor es un momento risible. El Nano comiéndose una llave y no de un buzón precisamente. El momento tornillo en la cabeza debido al frenazo del furgón. Te ríes, sí, pero te saca de la película.
- No es ni medio normal la cantidad de veces que los personajes dicen “hijoputa” en esta película.
- El furgón, con todo lo que está ocurriendo, atraviesa kilómetros y kilómetros de carreteras sin pasar por ningún pueblo o área de servicio en donde puedan advertir que algo va mal. El guion de esta película hace estas cosas: de repente, el policía se revela una salida secreta hacia el exterior del furgón, salida que los presos no han advertido hasta ahora, que conveniente.
- La película es el festival del cliché: el compañero policía que parecía muerto resucita porque llevaba un chaleco antibalas, Karra arrancando el camión haciendo un puente, Ramis reanimando al policía con el boca a boca.
- No estoy negando que haya lagos helados en España, pero uno que aguante toneladas de un camión con varias personas dentro... creíble en Suecia o Finlandia, pero no aquí.
- El CGI también es para hacérselo mirar. Toda la escena del camión hundiéndose en el lago, el humo saliendo de las bocas… si no se puede hacer de manera creíble, mejor no llevarlo a cabo.
El escopetazo en la mano es la puntilla de la película, ridículo e incoherente por parte del personaje ejecutor, en el contexto de un final sin nada especial.
- ¿El grupo de presos puede contener más estereotipos criminales? El típico mafioso rumano que te puede partir las piernas con la mirada, el típico yonki (dicho sea de paso lo falsa que queda la voz del actor intentando imitar el timbre de un drogadicto), el típico cani (en un destello de originalidad le llaman “El Nano”, espero que Patrick Criado no se encasille en estos papeles), el típico delincuente multiusos y listillo que se las sabe todas y en el culo puede esconder material para abrirte una celda, el típico delincuente latino que no para de decir “brodel” e “hijueputa”...y un señor mayor, porque alguien tiene que morir el primero.
- Cuando Javier Gutiérrez va a rescatar a su compañero, Karra empieza a dispararles con su fusil de francotirador. Las balas rebotan alrededor de Gutierrez, pero este apenas se inmuta. Lo creíble hubiera sido hacer algún tipo de aspaviento a modo de sorpresa, echar el cuerpo a tierra o salir corriendo.
- El tema de la niebla: no queda realista, a veces es poca, a veces es mucha, es muy selectiva. Entiendo que demasiada niebla no quedaría bien en pantalla al no verse lo que está pasando, pero esta niebla parece muy artificial, apta para un videoclip de música pop de los años 80, pero no para el caso que nos ocupa.
- El Nano amenazando a 5 tíos con la culata de un extintor es un momento risible. El Nano comiéndose una llave y no de un buzón precisamente. El momento tornillo en la cabeza debido al frenazo del furgón. Te ríes, sí, pero te saca de la película.
- No es ni medio normal la cantidad de veces que los personajes dicen “hijoputa” en esta película.
- El furgón, con todo lo que está ocurriendo, atraviesa kilómetros y kilómetros de carreteras sin pasar por ningún pueblo o área de servicio en donde puedan advertir que algo va mal. El guion de esta película hace estas cosas: de repente, el policía se revela una salida secreta hacia el exterior del furgón, salida que los presos no han advertido hasta ahora, que conveniente.
- La película es el festival del cliché: el compañero policía que parecía muerto resucita porque llevaba un chaleco antibalas, Karra arrancando el camión haciendo un puente, Ramis reanimando al policía con el boca a boca.
- No estoy negando que haya lagos helados en España, pero uno que aguante toneladas de un camión con varias personas dentro... creíble en Suecia o Finlandia, pero no aquí.
- El CGI también es para hacérselo mirar. Toda la escena del camión hundiéndose en el lago, el humo saliendo de las bocas… si no se puede hacer de manera creíble, mejor no llevarlo a cabo.
El escopetazo en la mano es la puntilla de la película, ridículo e incoherente por parte del personaje ejecutor, en el contexto de un final sin nada especial.