En esta segunda parte, nuestra zorrilla, perdón nuestra heroína resuelve el futuro de Japón de dos mandobles. Bueno, se entiende que a corto plazo porque como se ha visto a largo les ha ido de culo.

Otra característica que se aprecia en el film es que en Japón existen también muchos todo a cien chinos, para que luego digan que se llevan tan mal. Está claro que las pelucas con calva y cinta las tuvieron que sacar de ahí.

Desconozco si van a realizar una tercera parte, aunque es de suponer que Azumi viajará a Corea porque en su archipiélago no debe de quedar nadie a quien trinchar como un pavo. Eso sí, no la aconsejo que vaya a las 3.000 Viviendas en Sevilla o las Barranquillas en Madrid, porque la van a robar la katana y meter una paliza que va a protagonizar la versión de la jorobada de Hiroshima.

Seguiremos informando de más piezas de oro cinematográficas del imperio del sol naciente. Estén atentos a la pantalla.