Edwin Boyd es filme pulcro que nos muestra la vida de un personaje que vive tratando de encontrar el camino correcto, más que la vida de un gangster, es el reflejo de un ciudadano normal que tiene vocación como actor y artista, pero se siente rechazado y menospreciado por la sociedad.

Edwin Boyd es un ser carismático y alegre, pero se topa con paredes y no logra superarlas hasta que decide actuar…pero como ladrón de bancos (sin medir muy bien las consecuencias futuras).

Convincente la actuación de Scott Speedman, ya que por momentos me hizo recordar a un Paul Newman en sus mejores años, pero sin esos rasgos de excelencia que le imprimía Newman a sus interpretaciones, aunque lo logra por momentos.

El filme tiene algunos baches de continuidad que le restan puntos para ser una película redonda, pero tiene otros a favor, como lo es el buen manejo de la cámara y la ambientación. Tal vez le falta un poco de emotividad y de profundidad en algunos personajes pero se logra transmitir lo que se requiere. Creo que la respuesta está en la producción del filme y se nota que el presupuesto es un poco austero.

Un poco gris y por momentos lenta, pero vale la pena.