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Voto de diego_dgc:
23,018
Comedia. Drama
Cuando Andy Kaufman era un niño ya le gustaba organizar espectáculos de variedades, aunque no tuviera público. De adulto empieza a destacar como humorista y es descubierto por el cazatalentos George Shapiro, que le consigue un papel en "Taxi", una famosa serie de televisión, en la que, gracias a sus dotes cómicas, alcanza una gran popularidad. A pesar de ello, se plantea nuevos retos: con su colega Bob Zmuda crea el personaje de Tony ... [+]
16 de octubre de 2007
18 de 29 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿Por qué una película con un presupuesto de 82 millones de dólares dirigida por un director ganador de dos Óscar y con un reparto tan bueno apenas logra recuperar en taquilla algo más de la mitad de su presupuesto (47 mill.$)?
No es culpa de Andy Kaufman... Milos Forman tendrá que preguntarse qué hizo mal.
La película es una sucesión de escenas de la vida de Kaufman -tal como Bob Zmuda las recuerda...- y reproducciones de sketchs y actuaciones famosas. Por supuesto (¡y menos mal!) no están todas, para conocer la obra de Kaufman podemos ver grabaciones de suyas sin necesidad de que Carrey lo imite (YouTube, p.ej.).
Pero, ¿cuál es el sentido de un biopic? ¿Presentarnos la vida pública de un personaje tal y como la han conocido los espectadores? Este es un afán enciclopédico, y es lo único que Milos nos ofrece, a caso "enseñar a Andy Kaufman a los que no lo conocían". Es la versión de Andy según Bob Zmuda, George Shapiro y el propio Forman. Y es una versión bastante superficial...
La sensación que la película produce es de vacío. Porque el director deja escapar la posibilidad de ahondar en la persona (mejor que explicar los personajes, Latka, Clifton, etc.), de enseñar los porqués de un transgresor, un revolucionario del humor, un adelantado a su tiempo. No ofrece ninguna visión del Kaufman que no conocemos, el hombre que se reía de todo el mundo tomando el pelo a los espectadores.
Si Milos hubiese enseñado el lado humano, intentado mostrar dónde nace la genialidad de un ser incomprendido, donde nace la fantasía... talvez hubiese logrado que un público más numeroso acudiese a ver el biopic. Una oportunidad maravillosa... ¡desaprovechada!
No se arroja nada de luz sobre la "historia de vida de Kaufman". No hay nada que no hubiésemos visto ya.
Ni se profundiza, ni se trata el tema desde un punto de vista creativo, ni se aporta nada con un valor mayor del puramente didáctico.
Stanley Kaufman, el padre de Andy, coincide críticamente con esta idea, y recomienda el libro "Lost in the Funhouse", de Bill Zehme, para asomarse de una manera más honesta al interior de Andy Kaufman.
Y sí, la banda sonora es maravillosa y las actuaciones increíbles. Pero la banda sonora (y la fotografía) son las cosas que se elogian cuando la película no es buena de verdad.
Y Milos^ Forman esta vez... no está a la altura.
No es culpa de Andy Kaufman... Milos Forman tendrá que preguntarse qué hizo mal.
La película es una sucesión de escenas de la vida de Kaufman -tal como Bob Zmuda las recuerda...- y reproducciones de sketchs y actuaciones famosas. Por supuesto (¡y menos mal!) no están todas, para conocer la obra de Kaufman podemos ver grabaciones de suyas sin necesidad de que Carrey lo imite (YouTube, p.ej.).
Pero, ¿cuál es el sentido de un biopic? ¿Presentarnos la vida pública de un personaje tal y como la han conocido los espectadores? Este es un afán enciclopédico, y es lo único que Milos nos ofrece, a caso "enseñar a Andy Kaufman a los que no lo conocían". Es la versión de Andy según Bob Zmuda, George Shapiro y el propio Forman. Y es una versión bastante superficial...
La sensación que la película produce es de vacío. Porque el director deja escapar la posibilidad de ahondar en la persona (mejor que explicar los personajes, Latka, Clifton, etc.), de enseñar los porqués de un transgresor, un revolucionario del humor, un adelantado a su tiempo. No ofrece ninguna visión del Kaufman que no conocemos, el hombre que se reía de todo el mundo tomando el pelo a los espectadores.
Si Milos hubiese enseñado el lado humano, intentado mostrar dónde nace la genialidad de un ser incomprendido, donde nace la fantasía... talvez hubiese logrado que un público más numeroso acudiese a ver el biopic. Una oportunidad maravillosa... ¡desaprovechada!
No se arroja nada de luz sobre la "historia de vida de Kaufman". No hay nada que no hubiésemos visto ya.
Ni se profundiza, ni se trata el tema desde un punto de vista creativo, ni se aporta nada con un valor mayor del puramente didáctico.
Stanley Kaufman, el padre de Andy, coincide críticamente con esta idea, y recomienda el libro "Lost in the Funhouse", de Bill Zehme, para asomarse de una manera más honesta al interior de Andy Kaufman.
Y sí, la banda sonora es maravillosa y las actuaciones increíbles. Pero la banda sonora (y la fotografía) son las cosas que se elogian cuando la película no es buena de verdad.
Y Milos^ Forman esta vez... no está a la altura.
