Un film que no tiene mucha historia que narra como un hombre que se estrella en un lago de zona vikinga logra salir con vida sin ser el único superviviente...
El misterioso hombre del espacio viene acompañado de un bichejo asesino que ataca y mata todo lo que se mueve.
El guion es sencillo, pero está lejos de ser malo. Con sus más y sus menos, el film va transcurriendo como es de esperar. Con el monstruo aniquilando a diestro y siniestro mientras el protagonista (Jim Caviezel) se pelea con los vikingos del lugar para intentar convencerles de que esa cosa está ahí.
Además, contamos con la presencia de John Hurt, cuyo rol es siempre destacable, y de Ron Perlman (Hellboy) en un papel que no le sienta nada mal.
El aspecto de la criatura está muy bien. Es como un híbrido entre un Alien y un dragón. Su diseño es muy bueno y da pavor.
El romance entre la hija del rey (Sophia Myles) y el personaje principal no es predecible, sino lo siguiente. Y es que desde el principio cualquiera sabe por dónde van los tiros. Parece que no pueden hacer una película sin ningún rollo romántico, algo que no comprendo... pero bueno.
Hay bastantes muertes durante el visionado, como era de esperar.
Los momentos de tensión están bien, sobre todo los de ciertas partes.
El final se hace algo largo.
Otro detalle a destacar son los escenarios, los cuales son muy apropiados.