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Voto de Dexter Bernaldez:
3
7.3
85,322
Romance. Drama
En una residencia de ancianos, un hombre (James Garner) lee a una mujer (Gena Rowlands) una historia de amor escrita en su viejo cuaderno de notas. Es la historia de Noah Calhoun (Ryan Gosling) y Allie Hamilton (Rachel McAdams), dos jóvenes adolescentes de Carolina del Norte que, a pesar de vivir en dos ambientes sociales muy diferentes, se enamoraron profundamente y pasaron juntos un verano inolvidable, antes de ser separados, primero ... [+]
25 de abril de 2007
93 de 147 usuarios han encontrado esta crítica útil
Desde el estreno, esta película me olió a chamusquina, y no sólo porque generalmente aborrezca el género romántico, o porque esté dirigida por un director de segunda fila como Nick Cassavetes (que de lo único que puede presumir es de apellido ilustre), sino por su halo de cinta de culto para quinceañeras. Ante tan risible honor, uno se pregunta si esa fama responde a verdadera calidad cinematográfica o si, por el contrario, vuelve a tratarse del timo de la estampita.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
El inicio resulta tan prometedor como telefilmero: dos ancianos de geriátrico, interpretados por James Garner y Gena Rowlands, comparten la historia que el primero atesora en un antiguo diario, para más señas, escrito por un tal Noah.
La primera escena del susodicho diario no puede ser más inquietante: una feria igualita que la de "Al Este del Edén", en la que Ryan Gosling emula (con todo lo que ello implica) al mismísimo James Dean. Pero cuidado, porque la cosa no acaba ahí. Después de una serie de secuencias, inidentificables con ninguna película por estar trilladas hasta la saciedad, en que queda reflejada la condición social de los protagonistas y la imposibilidad de su historia de amor, continúan los homenajes encubiertos; una especie de cóctel entre "Rebelde sin causa" y "Esplendor en la hierba", cuyo momento álgido es aquél en que Gosling intenta hacer guarrerías españolas con Rachel McAdams (un clon de Natalie Wood) en un caserón inhóspito. Naturalmente, sin resultado.
A estas alturas, lo lógico sería apagar la tele, ponerle un 1 en filmaffinity y a otra cosa, mariposa. Pero el destino todavía se guardaba un As en la manga. Noah y su amada, reencontrados varios años después, deciden dar un plácido paseo en barca. A su alrededor, retozan adorables patitos. Hay muchos patos, la verdad. Docenas, centenares, miles… oye, oye, ¿no se están pasando un poquito con los patos? Yo, en su lugar, estaría acojonado. Pero… me cago en la leche. ¿Pero qué narices es esto? ¿La segunda parte de "Los pájaros" de Hitchcock? ¿Acaso Cassavetes se ha adelantado, de manera involuntaria, al temido remake de Michael Bay? En fin, mi madre y yo estuvimos media hora riéndonos con esa bobada que, por desgracia (o por suerte, según se mire) eclipsa casi por completo al resto del metraje.
Bueno, como soy persona agradecida, me permitiré darle un pequeño consejo al amigo Nick: no es lo mismo hacer uso de recursos melodramáticos de probada eficacia (véase la escritora Danielle Steel), que copiar burdamente esos recursos y hacerlos pasar por originales (véase el simulacro de novelista conocida como Ana Rosa Quintana). Más Steel y menos Quintana, colega.
La primera escena del susodicho diario no puede ser más inquietante: una feria igualita que la de "Al Este del Edén", en la que Ryan Gosling emula (con todo lo que ello implica) al mismísimo James Dean. Pero cuidado, porque la cosa no acaba ahí. Después de una serie de secuencias, inidentificables con ninguna película por estar trilladas hasta la saciedad, en que queda reflejada la condición social de los protagonistas y la imposibilidad de su historia de amor, continúan los homenajes encubiertos; una especie de cóctel entre "Rebelde sin causa" y "Esplendor en la hierba", cuyo momento álgido es aquél en que Gosling intenta hacer guarrerías españolas con Rachel McAdams (un clon de Natalie Wood) en un caserón inhóspito. Naturalmente, sin resultado.
A estas alturas, lo lógico sería apagar la tele, ponerle un 1 en filmaffinity y a otra cosa, mariposa. Pero el destino todavía se guardaba un As en la manga. Noah y su amada, reencontrados varios años después, deciden dar un plácido paseo en barca. A su alrededor, retozan adorables patitos. Hay muchos patos, la verdad. Docenas, centenares, miles… oye, oye, ¿no se están pasando un poquito con los patos? Yo, en su lugar, estaría acojonado. Pero… me cago en la leche. ¿Pero qué narices es esto? ¿La segunda parte de "Los pájaros" de Hitchcock? ¿Acaso Cassavetes se ha adelantado, de manera involuntaria, al temido remake de Michael Bay? En fin, mi madre y yo estuvimos media hora riéndonos con esa bobada que, por desgracia (o por suerte, según se mire) eclipsa casi por completo al resto del metraje.
Bueno, como soy persona agradecida, me permitiré darle un pequeño consejo al amigo Nick: no es lo mismo hacer uso de recursos melodramáticos de probada eficacia (véase la escritora Danielle Steel), que copiar burdamente esos recursos y hacerlos pasar por originales (véase el simulacro de novelista conocida como Ana Rosa Quintana). Más Steel y menos Quintana, colega.