Perfecto thriller en el que Eastwood vuelve a demostrar por qué es uno de los mejores actores del momento, aunque ello signifique- y más en esta clase de películas que hace en las que encarna a un policía- que su personaje sea demasiado parecido al de Harry Callahan.
No obstante, Eastwood se deja acompañar por dos grandes actores como John Malkovich y la ahora alicaída Rene Russo, que aportan su granito de arena a la película.
Destacar la música y la fotografía, y tal vez lo peor reside en la dirección de Petersen ( La tormenta pefecta; Das boot), que sería mucho mejor si los directivos le hubiesen permitido a Eastwood encarnar ese labor.
Sin embargo, la película resulta entretenida, interesante y la fotografía es impresionante.
Recomendable.