Haz click aquí para copiar la URL
España España · Pamplona
Voto de Meroe:
7
Serie de TV. Animación. Ciencia ficción. Thriller. Intriga. Drama Serie de TV (1998). 13 episodios. Lain Iwakura, una introvertida chica de 14 años, apenas tiene relación con la Red. Por ese motivo no se entera de unos e-mails que están circulando sobre una compañera de clase que se acaba de suicidar, Chisa Yomoda. Una semana después del suicidio, Lain recibe este e-mail de Chisa: "Querría que tú, al menos tú, supieras que sigo viva. Mi espíritu está aquí, y en la Red he encontrado a Dios." Al ... [+]
8 de marzo de 2018
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando decidí empezar a ver Serial Experiments: Lain no sabía lo que me iba a encontrar, no más allá de las simples apariencias. Una niña en una historia sobre tecnología, ordenadores, la red, y cómo ese vasto mundo virtual poco a poco toma el control del mundo en el que ella vive es un esqueleto demasiado simple, muy poco definido para lo que ésta serie realmente es, para todo lo que tiene que ofrecer. O quizás es todo lo contrario y no ofrece absolutamente nada. Tal vez ésta serie se recluye en sí misma como la propia y pequeña Lain, esperando que sean los demás los que hagan el esfuerzo por llegar a ella; y claro, solo los que se aproximen con curiosidad verdadera recibirán su calidez, así como obtendrán al final repuestas satisfactorias a sus dudas (todo ésto lo digo por lo que he leído en la red). Yo, sin embargo, no soy una de esas personas. Dada su extrañísima complejidad decidí ver dos veces Serial Experiments: Lain y aún no soy capaz de llegar a una conclusión respecto a mis propias impresiones. Como intentar agarrar el agua, su esencia resbala y se escurre entre mis dedos.

Sé que he obtenido información, una amplia cantidad de información por parte de Serial Experiments: Lain; sobre sí misma, sobre la filosofía, la religión y la percepción que el ser humano tiene o pueda tener de ellas. Pero sin preguntas formuladas con anterioridad, sin ni siquiera curiosidad por el contenido de la ¿historia? presentada, toda esa información se convierte en una enorme y pura cantidad de vacío. Así me he sentido con éste anime. Confusa, triste, decaida. Tal que la propia Lain, que eventualmente y varias veces a lo largo de la trama se descubre a sí misma sentada en el pupitre de su clase sin saber cómo ha llegado o cuánto tiempo lleva allí. Por paradójico que resulte su lentitud durante el desarrollo del argumento unido a la austeridad en los diálogos y las revelaciones me han saturado como ninguna serie había hecho hasta ahora. Claro que éste anime no tiene punto de unión con ningún otro que haya visto. Podríamos decir que es único en su género. Supongo que eso es un punto a favor para Serial Experiments: Lain.

Otro es que me ha hecho tomar plena consciencia de que, en el fondo, soy una persona de gustos clásicos. Permitidme ser más clara. Las historias que vamos descubriendo (en libros, películas o series) no son la realidad, sino una simulación de la misma que nunca existió. Todas son un reflejo de la vida pero retocadas por el diseño humano: llamémoslo hiperrealidad. ¿Es mejor que lo que tenemos? Sin duda, pero ya hablaremos de eso en otra ocasión. El hecho es que en cada creación de cada historia la primera decisión que se toma es determinar qué grado de realidad se va a representar. Los umbrales son difusos pero rara vez se alejan de lo que la cultura del momento establece como “aceptable”. Serial Experiments: Lain es el ejemplo que confirma la regla. La hiperrealidad que muestra es tan abstracta e inclasificable que no encuentro nada a lo que poder compararla. Y eso me ha provocado incomodidad ¿Por qué? Porque en el fondo soy una persona de gustos clásicos.

Serial Experiments Lain me ha hecho darme cuenta de que todo aquello que mi mente alaba y califica como “novedoso” o “fresco” no dejan de ser cosas conocidas pero ligeramente diferentes y que así es como me gusta que sea. Es lo que espero siempre a la hora de enfrentarme a un nuevo anime. Me siento cómoda y relajada ante algo que ya conozco, aunque sea una renovación, una inspiración de algo ya creado. Nada se construye de la nada, ni siquiera algo tan abstracto como Serial Experiments: Lain pero el no encontrar un hilo conductor al que aferrarme me ha provocado una vaga sensación de desprotección.

Sin embargo no quiero dar una impresión errónea de Serial Experiments: Lain. Es lo último que yo calificaría como una historia intrascendente. Pero también es todo lo contrario a lo que yo entiendo por un anime cautivador, a un anime que hace que desees quedarte en él. Es demasiado abstracto, demasiado intrincada y subrealista (hiperrealista, en realidad) su trama como para resultarme atractiva. Si hay un calificativo que puedo otorgarle es el de el anime más extraño que he visto.

Todo comienza con el suicidio de una joven colegiala llamada Yamoda Chisa, que tras deambular por las calles sola y desesperada decide acabar con su sufrimiento saltando desde la azotea de un edificio. Sonríe. Unos días después varios alumnos reciben un correo proveniente del e-mail de Chisa en el que asegura seguir con vida en la red. Sin embargo nadie se toma en serio lo que sin duda es una broma de mal gusto, nadie excepto Lain. Ella es una alumna más, una niña perfectamente normal salvo por el detalle, y ésto lo digo solo como apunte, de ser la única persona de ojos grandes y castaños en un mundo de ojos negros (no es relevante, pero me gustó ese matiz). Como muchas jovencitas a punto de entrar en la adolescencia Lain es bonita, introvertida, por norma general recluida en sus pensamientos y poco sociable con el resto del mundo. Pero cuando lee el mensaje de la que dice ser la consciencia real de Chisa, despierta en ella la curiosidad y el deseo por encontrar las respuestas al inexplicable misterio. Y es que Chisa no solo dice seguir con vida en la red, también asegura el haber encontrado a Dios. Lain comienza entonces una búsqueda que la tienta cada vez más profundamente al interior del mundo virtual, una viaje que la llevará a conocer a diversos y extraños personajes también implicados en la red, así como descubre la libertad de ser una voz sin cara ni filtros en un mundo hecho de datos. Un mundo en el que nunca puedes saber en quién confiar. Y ésto es cuanto puedo contar.

(Sigue en spoiler).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Meroe
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow