Tengo una máxima, nunca hacer una crítica de una película que tenga más de medio centenar de críticas. No podré añadir nada nuevo o llamativo como para que mi crítica convenza a algún usuario de ver (o no ver) una película. Generalmente en los grandes clásicos me ocurre que no puedo criticarlos (reseñarlos mejor dicho), porque tienen ese número de criticas (o lo sobrepasan). Sin embargo, y aquí mi asombro, este musical, no llega ni a la mitad de las críticas que yo exijo. No llega ni a 25 ¿Qué ha pasado?

Por un lado tenemos al gran Stanley Donen. No se puede decir mucho de él. Es grandioso. Comedia tras comedia, melodía con melodía se ha hecho un hueco en la historia del cine. El tridente "Cantando Bajo la lluvia", "Charada" y "Una cara con ángel" son, para mi, sus tres mejores películas, y las más representativas de su carreras (sin menospreciar a otras de sus películas). Y aún así no ha conseguido atraer la atención de los usuarios de esta plataforma para ver su película y reseñarla.

Por el otro lado esta la preciosa Audrey y el inigualable Fred. Una dupla maravillosa que debería hacer la delicia de cualquier cinéfilo. Pero no, no ha sido así.

Los tres, dos delante de la cámara y un detrás componen esta crítica al mundo de la moda (y aunque muy tagencialmente, también del cine) y al mundo intelectual (y tagencialmente a las películas transcendentales que al final no van de nada). En resumen, a lo tonto no deja títere con cabeza; y todo lo hace con humor, bailes y mucho ritmo.

No es una película menor, aunque lo parezca. Cuando hablamos de la filmografía de Audrey o de Fred. Cuando enumeramos musicales o clásicos de los 50 esta película no se encuentra entre las 10 primeras de cada grupo (sí, soy tan cinéfilo que puedo nombrar treinta películas de estas categorías y no nombrar "Una Cara con ángel"). Sin embargo, esto no nos tiene que echar para atrás a la hora de verla; al contrario. Tiene que emocionarnos más. Estamos disfrutando de un clásico sin sobrevalorar, sin estar tan manido por la sociedad que sus escenas y sus chistes hayan sido repetidos hasta la saciedad.

¡Disfruten!