Magnifico cuento de hadas, lleno de ingenuidad y felicidad. Hayao Miyazaki sobrepasa las barreras y logra robar no solo el corazón de los niños, sino también el de los adultos y es que es imposible no dejarse llevar por el pequeño rincón tranquilo de ese mundo imaginario, donde no existe maldad alguna, donde las familias se aman, los vecinos viven en armonía y se ayudan los unos a los otros y sobretodo existen seres increíbles como Totoro y sus amigos, tan divertidos como llenos de bondad.

Disney ya quisiera tener en su repertorio una película animada de esa calidad y profundidad. Por otro lado, aquella pequeña obra maestra se ha logrado diferenciar de las demás películas de animación japonesa llena de violencia y ciencia ficción.

Satsuki, su hermana y su papá se mudan a una casa en el bosque, mientras su mamá se recupera en el hospital. Un día, descubre que lo que decía su hermana menor era cierto: Totoro sí existe. Desde ese momento se verán envueltas en una serie de aventuras.