La verdad es que quizás no sea del todo objetiva con esta película, ya que la ví justo ayer, y en uno de esos momentos que todos tenemos en los que nos sentimos más sensibles de lo habitual, pero, realmente, ¿quién puede afirmar ser totalmente objetivo con algo?, en fin, me pareció una película preciosa, 2 horas de absorbente historia, que desde el principio te mete dentro, y cuando termina te hace sentir como se sentiría cualquiera de los alumnos, si fueran reales y no de ficción.
Totalmente recomendable, no sólo porque es entretenida y dinámica ( cosa que no es poco pedir hoy en día para una película), sino porque trata temas éticos con hermosa claridad y vehemencia, y quizá y ojalá, después de ver esta película, todos podamos encontrar y, por supuesto, erradicar de nuestro camino en la vida las ataduras que nos impiden "disfrutar del momento"(carpe diem) mirando desde el cristal que nos regala ese maravilloso capitán, mi capitán.