A diferencia de la mayoría de críticos, no veo la grandiosidad de esta película. Es cierto que es la primera adaptación que de la novela de Bronte hacen que veo, pero, a nivel personal, si esta es la mejor adaptación que han hecho hasta el momento, cómo deberán ser las anteriores, auténticos bodrios pensaría. El caso es que Fukunaga no consigue emocionarme, no consigue siquiera meterme en la historia. Y las actuaciones tampoco es que ayuden demasiado. Wasikowska ya como la Alicia de Burton no consiguió convencerme, y aquí tampoco, a pesar de que mi idolatrada Meryl Streep laureó su trabajo cuando recibió el Globo de oro. Asimismo Michael Fassbender, al que le he visto en mejores papeles, no termina de rematar el que aquí le ha tocado; en su versión de misógino altanero está genial, pero en el momento en que cede al amor y llega incluso a la humillación, abandona esa imagen de gran actor y se convierte en lo más vulgar en interpretación. Lo único que ayuda a elevar a esta Jane Eyre son la siempre magnífica Judi Dench y la muy resuelta Sally Hawkins, y, por supuesto, su trabajo artístico y su buena fotografía, a pesar de tener un vestuario demasiado recargado y que tanto a Wasikowska como a Hawkins quedaba como fuera de lugar.
Mi impresión general fue una cinta muy convencional que simplemente abusaba de su "epoquismo" y de la estela que la novela ha ido dejando en su camino, de resto, un mérito más bien escaso (salvo en lo ya mencionado), y una decepción en toda regla.