Entretenida, es entretenida. Dura hora y cuarto que se pasa volando,la producción es buena, pero como comedia.. no me he reído en una sola ocasión. Es transgresora porque dice continuamente tacos como "Hijo de puta" y equivalentes, porque hablan de sexo y se ríen de las religiones, pero hay muchas series de animación para adultos que le dan vuelta y media a "La fiesta de las sanchichas"
La película da vida a los productos típicos de un supermercado, para decirnos que Dios no existe y que esperar ir al paraíso con nuestra muerte es de necios. Por eso los alimentos creen que cuando sean escogidos por un cliente irán al Más Allá, mientras si caducan y los tiran a la basura, irán al Oscuro, al infierno.
La elección como protagonista de unas salchichas, léase, perritos calientes, como varones y unos panecillos, como hembras, es la excusa para soltar chistes verdes, por desgracia, como digo en el título de la crítica, poco divertidos.
La relación entre los personajes/productos es demasiado simple, el romance entre la salchicha y el panecillo, y el villano (una ducha vaginal) que quiere vengarse de que deformaran su cuerpo.El único acierto en ese apartado, es el del chicle en silla de ruedas, en claro homenaje al gran científico Hawkings.

Mi conclusión es que se deja ver, pero no esperes reírte demasiado con sus obscenidades, más bastas que inteligentes, ni con su burla de Dios, porque se limitan a seguir el camino que muchas otras animaciones para adultos abrieron hace tiempo.