Simon Pegg y Nick Frost, son esa pareja de humoristas que han legado a la historia del cine una de las mejores parodias que recuerdo en los últimos años como es "Shaun of the dead", a parte de la también célebre "Hot Fuzz". Ambas películas rodadas en su Gran Bretaña natal.

Ahora le toca el turno a "Paul", y para ello se trasladan a los Estados Unidos. Bajo la dirección de Greg Mottola, nos traen esta comedia, que como resulta evidente, parodia los grandes clásicos de Ciencia-Ficción: desde la saga "Star Wars", con la versión country de el célebre y freak tema "Cantina Band" de la banda sonora de John Williams; pasando por la entrañable "E.T.", "Encuentros en la tercera fase"; e incluso, "Mi amigo Mac".

Paul se aparece ante nuestros ojos como un extraterrestre que en su huida, se topa con dos humanos, que bien podrían pasar por extraterrestres. A partir de ahí, se desarrolla una road-movie, bastante al uso, pero que nos da algunos momentos de auténtico humor inteligente, algo que es de agradecer en el panorama actual. Paul es irreverente, pero no transgresor, y quizás eso es lo que más se le podía pedir al guión de los británicos, un poco más de agresividad. Sin embargo, si que podemos disfrutar de algunos divertidos gags con la religión como fondo, o el estilo de vida norteamericano, o el universo freak que tanto parecen conocer Pegg y Frost.

Por tanto, estamos ante una comedia más que correcta, que entretiene, y que además, regala un par de cameos más que divertidos, y que demuestra que cuando algunos actores y directores saben reirse de sí mismos, nos hacen disfrutar al público.