Entretenida cinta de Martin Campbell que cuenta con buenas actuaciones como la de Anthony Hopkins, divertidas como Antonio Banderas y la parte bella de la mano de Catherine Zeta-Jones, tiene todos los ingredientes del género, espadas, traiciones, venganza y luchas sin cuartel, no cuenta con un gran guión, el argumento es bastante entretenido y la fotografía en ocasiones evocadoras de la época, el vestuario y decorados son bastante buenos y tiene una gran banda sonora asi que sin lugar a dudas tiene lo suficiente para ser un film comercial digno de ver por cualquiera cuyo objetivo sea pasar un buen rato.