Hay tres cosas que me han dejado con el culo torcido ("twisted ass" para la muchachada):
-El clon de Ana Pastor (que se reúne con políticos en hoteles...)
-Ver el cameo de "Petón" como periodista.
-Usar escenas donde existen y se usan cabinas de teléfono.

Se ha dicho que es una película necesaria. Menos mal, en España no hay medios que denuncian la corrupción de los partidos o sus chanchullos con empresarios y/o periodistas... por favor...
El caso es que esta película es anodina en todos los sentidos. Por su falta de profundidad en el tema y por lo que nos muestran en pantalla (lo cual es ver al amigo Antonio ir arriba y abajo a hablar con gente el 80% del tiempo).

Todo empieza bien, pero solo la primera media hora ya que luego ni se entiende ni se ahonda en nada.
Más te vale tener un organigrama para entender todos los cargos de los personajes y la relación entre estos, teniendo en cuenta que muchos tienen relevancia 10 minutos y luego se esfuman.
Por otro lado la cámara pasa de ser ágil a marear mientras la música empieza acompasando perfectamente las escenas a ser repetitiva y machacona.
Como último detalle es necesario destacar lo interactivo de la película ya que muchas relaciones o situaciones se dejan a la libre imaginación del espectador. No quiero pensar que no lo hayan hecho aposta... ¿no?

La verdad es que me aburrió tremendamente y no precisamente por su tema. Con carga política me quedo con "V de vendetta", "Black mirror: El himno nacional y El momento Waldo" o "House of cards".