Tomas cine de Yakuzas a lo pobre, mafiosillos/pandilleros negros más cutres todavía, algo de Shakespeare para que la rapera emergente y el artista marcial no se depriman al coger sus cheques y te clavas una peli mal hecha, mal rodada y que intenta aunar cine de mafias con gracietas de pandilleros (o más bien de un pandillero gordito y su tribu de atontados). Son dos generos que pegan tanto como Jet Li y Aaliyah, que en esta película dan la impresión de haber firmado un contrato que prohibe la química de pareja o tan siquiera un beso (recordemos que esto es una violación- digo revisión de la historia de Romeo y Julieta.
Como curiosidades decir que el director de la película consigue logros interesantes:
-TODAS las escenas de acción de Jet Li está mal rodadas. La realización consigue neutralizar cualquier tipo de interés de las piruetas.
-Se puede hacer un book de Aaliyah con los planos que se emplea en una de sus conversaciones y sólo con las tomas que usan en uno de sus monólogos, y aun así en todos los planos su interpretación es lamentable.
-Consigue plagiar escenas de motos y metralletas a John Woo utilizando todavía más cámara lenta que él, eso si resolverlas bien es otra historia.

Y aún se podría seguir muucho rato, pero para qué señalar gazapos en una peli que no deberías ver.